Lluvia de estrellas: cuándo, cómo y dónde ver las Delta Acuáridas en julio 2022

En verano tenemos dos lluvias de meteoros: las Delta Acuáridas a finales de julio 2022 y las Perseidas o “lágrimas de San Lorenzo”, que se producen en agosto. Cuándo, cómo y dónde ver las estrellas, que este año serán especialmente brillantes por la coincidencia con la luna nueva.

Todos los años, entre el 12 de julio y el 23 de agosto, los meteoros de las Delta Acuáridas atraviesan el cielo con un destello fugaz, alcanzando su máximo en torno al 30 de julio.

El mejor momento para ver las Delta Acuáridas es a partir de la medianoche hasta el amanecer.

¿Cuándo será la lluvia de estrellas de las Delta Acuáridas 2022?

La noche de máxima actividad de las Delta Acuáridas será la del 29 al 30 de julio, es decir, del viernes al sábado. Podrán verse, si las condiciones de observación lo permiten, hasta 40 meteoros por hora, que viajarán a una velocidad alrededor de 40 kilómetros por segundo.

Este verano estamos de suerte, puesto que el momento de máxima actividad de las Delta Acuáridas será dos días después de la luna nueva (el novilunio tendrá lugar el día 28 de julio), y por tanto la fina luna, casi invisible, favorecerá que el cielo esté oscuro y el brillo de las estrellas fugaces destaque.

¿Cuál es el origen de las Delta Acuáridas?

Se piensa que los meteoros de las Delta Acuáridas pueden provenir del cometa 96P Machholz, un cometa de corto periodo que orbita alrededor del Sol cada 5 años aproximadamente, informan desde Observatorio Astronómico Nacional (Instituto Geográfico Nacional, IGN).

Las lluvias de meteoros suceden cuando nuestro planeta se cruza con el camino orbital de un cometa. Esta órbita está llena de partículas de la cola del cometa, que entran en la atmósfera terrestre a gran velocidad, y se calcina por la fricción con el aire, creando así el resplandor luminoso que conocemos como meteoro o estrella fugaz.

Cómo y dónde disfrutar de la lluvia de estrellas en julio

Para ver la lluvia de estrellas, como ocurre con la mayoría de los eventos astronómicos, es necesario alejarse de las luces de las ciudades, puesto que la contaminación lumínica impide que veamos el cielo oscuro.

Busca un lugar sin farolas ni obstáculos que estorben a la vista del cielo, como árboles y edificios, y no utilices instrumentos ópticos que limiten el campo de visión.

Conviene dirigir la mirada hacia las zonas más oscuras, en la dirección opuesta a la posición de la Luna, aunque en esta ocasión será casi imperceptible. Espera a que tu vista se haga a la oscuridad y espera a medianoche para ver los meteoros mejor.