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Los Mossos d'Esquadra han dado explicaciones este viernes tras el fracaso del dispositivo policial para detener a Carles Puigdemont, quien huyó de Barcelona el día anterior al finalizar su discurso en Arc de Triomf tras ponerse un sombrero y subirse a un vehículo, con una silla de ruedas en el asiento delantero, junto al secretario general de Junts, Jordi Turull.
Carles Puigdemont apareció en la previa de la jornada de investidura de Salvador Illa, subido a una tarima para celebrar su regreso a España tras siete años fugado. Un discurso que apenas duró cuatro minutos y que acabó con otra huida del expresident catalán, que sorprendió a toda la población. Incluido, los propios Mossos d'Esquadra.
El objetivo era detenerlo "en el lugar más idóneo" una vez acabase el discurso, aunque la masa de personas y autoridades políticas y electas impidieron la actuación. "Abandonó con rapidez la tarima. Los efectivos intentaron aproximarse hacia Puigdemont, impidiendo este objetivo una masa de personas que configuraron un muro y no nos permitieron acceder", lamenta el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent, sobre una actuación inédita, en la que Puigdemont perdió de vista a los mossos tras entrar en una carpa junto a Jordi Turull.
"Se pusieron un sombrero, subieron a un vehículo y salieron del lugar", ha relatado Sallent, sobre la fuga que pilló de imprevisto al cuerpo policial. "Avisaron de los hechos y empezaron una persecución del vehículo, que iba con una silla de ruedas delante y se perdió. Sin embargo, la persecución a pie, corriendo entre la multitud, no sirvió para detener el coche, que perdieron de vista en la calle Circumvalació de Barcelona
En ese momento, se activó el dispositivo 'Jaula'. Un dispositivo que colapsó las entradas de Barcelona y estuvo activo hasta las 13:22 horas: "A partir de allí, sustituimos el cierre por una sucesión de controles de paso en las vías de comunicación que, de acuerdo con el análisis realizado, podía tener más sentido realizarlo".
Puigdemont ya había desaparecido junto a Jordi Turull, dirección a la Cataluña Norte, donde el expresidente finalmente puso rumbo a Waterloo.No obstante, Sallent no descarta que continúe en Barcelona al no tener ninguna evidencia de que esté en Bélgica o fuera de las competencias de los Mossos d'Esquadra, por lo que seguirán trabajando para cumplir la orden de detención.
Por su parte, el conseller de Interior en funciones, Joan Ignasi Elena, ha asegurado que los Mossos d'Esquadra no se esperaban "un comportamiento tan impropio" de quien había sido la máxima autoridad de Cataluña, en referencia a la huida del expresidente Carles Puigdemont, acusando a Junts de usar a los ciudadanos como extras de un engaño.
Elena ha lamentado que desde Junts se urdiera un plan para dinamitar y deslegitimar el pleno de investidura "sencillamente porque no gustaba el resultado del mismo", en una maniobra que entiende como un ataque al gobierno actual para colocarlo fuera del frente independentista.
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