El Hospital del Mar ha realizado la primera transposición uterina y de ovarios con éxito de España. Una técnica que ofrece esta alternativa a las pacientes con un cáncer en el área de la pelvis y que quieran ser madres en el futuro.
El procedimiento, que se puede definir como un autotrasplante uterino, se ha llevado a cabo en una paciente diagnosticada de cáncer de recto localmente avanzado, permitiendo a la mujer afectada por un tumor en la zona pélvica mantener la posibilidad de ser madre y, a la vez, evitar una menopausia precoz, al proteger tanto el útero como los ovarios de los efectos del tratamiento con radioterapia.
En todo el mundo solo se han llevado a cabo unas veinte cirugías de este tipo. En algunos casos, las pacientes han podido tener un embarazo con éxito y el primer bebé nació en Brasil el año 2022 y en Estados Unidos en marzo del 2024.
Ahora, el Hospital del Mar ha llevado a cabo el primer caso en España. Se trata de una mujer de 36 años con diagnóstico de cáncer de recto localmente avanzado, que fue intervenida por primera vez el mes de noviembre del 2023.
La segunda intervención se llevó a cabo el pasado mes de junio, cuando ya había acabado el tratamiento oncológico, coincidiendo con la cirugía del tumor rectal. Ambas intervenciones se hicieron con cirugía robótica, para minimizar su impacto.
En este caso, el segundo procedimiento se hizo coincidir con la resección del tumor de recto, hecho que añade complejidad e incrementa de forma significativa el riesgo de dañar la vascularización uterina. De este modo, la paciente podrá, si lo quiere, ser madre.
Esta transposición uterina y de ovarios cuenta con una doble cirugía. La primera antes del inicio de la radioterapia, para trasladar tanto el útero como los ovarios dentro del abdomen, a una posición donde quedarán libres de los efectos de la radiación.
El útero mantiene la vascularización a través de los ovarios para asegurar su viabilidad mientras se lleva a cabo el tratamiento contra el tumor. Una vez ha acabado la radioterapia y la quimioterapia, se lleva a cabo una segunda intervención, en la cual se devuelven los órganos afectados a su ubicación original.
"Se trata de cambiar la anatomía de un órgano de la pelvis, situándolo en otra ubicación. Lo dejamos con la vascularización necesaria para garantizar su viabilidad y, una vez completado el tratamiento oncológico, lo devolvemos a su ubicación normal", explica la jefa de sección del Servicio de Obstetricia y Ginecología y una de las responsables de la cirugía, la Dra. Gemma Mancebo.
En el proceso para determinar qué pacientes se pueden beneficiar de esta intervención intervienen los servicios de Aparato Digestivo, de Cirugía General, a través de la sección de Cirugía Colorrectal, el de Oncología Médica y el de Oncología Radioterápica.
Se ha establecido un circuito para la detección y derivación de las mujeres diagnosticadas con un tumor en la zona pélvica que precisan tratamiento con quimioterapia y radioterapia, para valorar si se pueden beneficiar de esta intervención, sin que ello provoque retrasos en el inicio del tratamiento del cáncer, con un papel destacado de la enfermera gestora de casos.
En aquellas de 40 años o menos, se les ofrece la posibilidad de proteger el útero y los ovarios para mantener la posibilidad de un embarazo. A las de menos de 47 años, la transposición solo de los ovarios, para protegerlos de una menopausia precoz.
Para poder optar a este tipo de intervención, las pacientes tienen que presentar un tumor localizado, se estudia la extensión para determinarlo, que tenga que ser tratado con radioterapia en la zona pélvica, con posible afectación al útero y a los ovarios. En el Hospital del Mar, la transposición de ovarios ya se ofrecía y se llevaba a cabo para evitar la menopausia precoz en pacientes jóvenes con cáncer de cérvix.
"Esta técnica supone darle esperanza a una paciente joven, que todavía no ha cumplido sus posibles deseos de ser madre y a quien se le ha diagnosticado un cáncer que no afecta al sistema genital, pero el tratamiento del cual sí que puede afectar a su capacidad reproductiva y hormonal", destaca la Dra. Ester Miralpeix, médica adjunta del Servicio de Obstetricia y Ginecología.
Una vez se hace la segunda cirugía y se da por superado el tratamiento contra el cáncer, la paciente puede optar, si lo quiere, por el embarazo. En este caso, se recomienda recorrer a la fecundación in vitro, a causa de la posible toxicidad de la quimioterapia que se utiliza contra el tumor sobre los ovarios, y por cesárea a la hora del parto.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.