La Diada de Sant Jordi en Barcelona tendrá más paradas y recuperará La Rambla en su totalidad, en el primer año con copago por parte de paradistas en zonas profesionales, como el Passeig de Gràcia, La Rambla y Gran de Gràcia.

Así lo ha confirmado este lunes el representante de la Cambra del Llibre, Jordi Farré, y el presidente del Gremi de Llibreters, Èric del Arco, quienes han subrayado que las perspectivas son "buenas" para el próximo 23 de abril. Una jornada que cae en laborable y que confían en una cifras similares a las de 2023, con 1,87 millones de ejemplares vendidos y 24 millones de facturación.

El número de paradas volverá a crecer este año y habrá 336 puestos en los espacios profesionales, desde los 320 del año pasado, 3.356 metros en dichas áreas, que aumenta desde los 3.294 de 2023, y 214 firmas de libros, que aumenta en una, y desde la Cambra del Llibre se ha destacado que siete distritos tendrán áreas profesionales.

Este Sant Jordi se recuperará La Rambla en su totalidad para la venta de libros y rosas, desde Canaletes hasta Santa Mònica, después de la prueba realizada el año pasado en un tramo.

Una de las novedades de este año es el copago de los paradistas en algunas zonas profesionales del día de Sant Jordi, con una aportación por parte de los paradistas que parte de los 80 euros por una de 6 metros para los agremiados y de 100 para los no agremiados, y un máximo de 24 metros para aquellas con firmas, en unas tarifas que han sido "consensuadas", según la Cambra.

Del Arco ha remarcado que el ritmo de inscripción para tener parada ha sido un poco superior a otros años y que la instauración de este copago nace de una reflexión interna en los gremios, y ha considerado que "hacía falta" porque permite unas condiciones de trabajo mejor a los profesionales.

También ha afirmado que "ha venido para quedarse" si permite trabajar en mejores condiciones, pero ha dicho que una vez pasado Sant Jordi se hará una reflexión interna abierta, ante las voces críticas que han surgido pero de las que ha dicho que no se han dirigido a él.

Del Arco ha sostenido que era necesario ordenar el modelo, con unos espacios profesionales con unos servicios básicos, por ejemplo, de luz, regiduría o el paso de transporte urgente, y ha señalado que el anterior "se ha vuelto inviable" con más de un millón de visitantes esa jornada.

Ferré ha dicho que esta aportación no quiere decir que se elimine el carácter popular de la fiesta, y ha resaltado que el Ayuntamiento de Barcelona no cobra una tasa sino que el sector participa en el coste de la jornada, que ha cifrado en unos 240.000 euros, de los que el sector aportará unos 40.000, alrededor del 15%.

De cara a los libros más vendidos de la jornada el día de Sant Jordi, se dará "tendencias" de los que más venden, el 24 darán otra lista todavía no cerrada y que no será hasta una semana después, el 29, cuando se dará la clasificación definitiva tras procesar los datos de librerías y paradas.

La lista de los más vendidos supone el 6% de las ventas totales de ese día, una demostración de la "bibliodiversidad" de la jornada, y Del Arco ha señalado que la jornada supone la facturación de un mes para las librerías.