Barcelona acoge una doble exposición de fotografías que muestra la vida de Marilyn Monroe y Elvis Presley antes de ser famosos. Un viaje a través del legado de las dos leyendas, en el que el público puede explorar hasta el próximo 24 de marzo los momentos más íntimos inmortalizados en una colección con casi 100 instantáneas.

'Becoming Marilyn & Becoming Elvis' muestra por primera vez en España las fotografías que realizó André de Dienes a Marilyn Monroe y Alfred Wertheimer a Elvis Presley antes de ser estrellas.

En el caso de la icónica actriz, modelo y cantante estadounidense, los espectadores podrán presenciar una colección de 51 fotografías realizadas entre 1945 y 1953, en la galería de arte FotoNostrum.

"Dienes vivía en Nueva York y tenía una fascinación por el concepto de la belleza californiana. Contactó con una agencia de modelos y la primera persona que le enviaron fue precisamente Norma Jeane, que conoceremos más adelante como Marilyn Monroe", explica Leonor Fernández, comisaria de la exposición

Desde primer momento, el fotógrafo se quedó fascinado con ella. "Se generó casi una obsesión que duró casi toda su vida. De hecho, iniciaron una relación bastante íntima y fueron amantes".

La estrecha relación empezó en 1945 y duró cuestión de un año. "Hicieron un viaje por la costa de California para que él pudiera fotografiarle, tanto la belleza de ella como la de paisajes". En una de sus quedadas, el fotógrafo llegó a pedirle matrimonio, pero Norma Jeane lo tenía claro.

"Quería convertirse en una estrella. No coincidía con los ideales de boda que tenía él", explica sobre el sueño de la futura Marilyn Monroe, quien mantuvo contactos esporádicos con André de Dienes hasta 1954.

"Estas fotografías representan una pasión personal en busca de la belleza de California y una Marilyn que no estamos acostumbrados a ver. Es una persona que aún no es el icono al que llega a convertirse. Esa imagen se genera a partir del año 1954".

En el caso de las fotografías al rey del rock, Albert Wertheimer las realizó durante dos semanas en 1956. Es una colección de 49 fotografías en un viaje de regreso de Nueva York a su Memphis natal, que retrata a un Elvis de 21 años que aún podía salir a la calle, comprando una camisa, con su madre o jugando con un peluche.

"En marzo de 1956, Elvis era desconocido y en diciembre ya era multimillonario". La colección también muestra una última fotografía en 1958, cuando se alistó en el ejército y era mundialmente conocido, y Wertheimer lo volvió a ver. Otra de las célebres instantáneas es la del beso con Bárbara Gray, que durante unos meses fue su novia.

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