La Audiencia de Barcelona ha condenado a 16 años de prisión a Pilar Vázquez, una de las gemelas de Sabadell (Barcelona), junto a su pareja sentimental Isaac Gil, con una pena de 17 años por el asesinato a golpes de Pedro Fernández, novio de Dolores Vázquez, que en su caso el juez presidente del jurado ha impuesto una pena de 20 años de cárcel.

La sentencia condena a los tres acusados por el delito de asesinato con alevosía, y a una de las gemelas con agravante de parentesco, que ocurrió en la noche del viernes 9 de 2021 en Sabadell. También les impone una indemnización solidaria de 200.000 euros. 

El jurado declaró culpables de asesinato a las gemelas y al novio de una de ellas el pasado viernes. La Fiscalía reclamaba 24 años de cárcel y as acusaciones mantuvieron que se trataba de un plan de los tres para acabar con su vida aunque una de ellas alegó que era víctima de maltrato.

Pedro Fernández murió tras ser brutalmente golpeado con una herramienta, una pata de cabra, en la cabeza por Isaac, así lo ha confesado el sospechoso. Tras la agresión, Fernández pudo huir e intentó escapar por las escaleras.

El acusado lo "cazó" y continuó golpeándole la cabeza hasta que la víctima quedó inconsciente. Los Mossos d'Esquadra, que estaban a cargo de la investigación, detallaron que el rellano quedó lleno de sangre y con restos del cerebro de la víctima.

Todo comenzó cuando Dolores llamó a Pedro para que fuese a dormir con ella esa noche. Cuando ambos estaban en el dormitorio, Pilar e Isaac, sus cuñados, entraron en la casa. Isaac "movido con la intención de acabar con su vida y actuando en común acuerdo para tal fin con las dos mujeres acusadas", agredió a Pedro con una palanca metálica. Según el fiscal, le asestó "múltiples golpes" con "extrema violencia" hasta que se cayó al suelo.

Una vez que Isaac acabó con la vida de Pedro, tanto Isaac como las gemelas limpiaron el rellano para no dejar pruebas y trasladaron el cuerpo a la vivienda de Dolores, donde los agentes lo encontraron envuelto en una manta. Los vecinos fueron testigos de cómo los tres acusados limpiaban la escena e incluso vieron cómo Isaac puso el cuerpo de pie para comprobar que estaba muerto.