La vecina que llamó al 112 la noche del crimen de las gemelas: "Eran golpes como si estuvieran rompiendo ladrillos"

La vecina que llamó al 112 la noche del crimen de las gemelas Dolores y Pilar Vázquez, acusadas de matar al novio de una en 2021 en Sabadell (Barcelona) junto a Isaac, novio de una de ella, ha declarado este miércoles que escuchó "golpes y una respiración fuerte", como "si estuvieran rompiendo ladrillos".

En la tercera sesión del juicio con jurado popular celebrada este miércoles en la Audiencia de Barcelona, la testigo ha recordado que ante los ruidos decidió llamar a emergencias y pedirles que enviaran una patrulla, "para quedarnos tranquilas" al tener a sus hijas alteradas tras los hechos.

La vecina se asomó a la mirilla de su casa y se encontró a las gemelas limpiando. Incluso, en un momento, llegó a abrir la puerta al rellano, aunque una de sus hijas le advirtió que se veía sangre y volvió a cerrarla.

"Escuchaba como arena. Para mí sonaba como un corcho y luego vi que era el cuerpo de ese hombre. No los conocía. Habíamos coincidido con ellos en el ascensor", ha explicado la vecina, quien también ha afirmado que los Mossos d'Esquadra más tarde fueron a su piso y le comunicaron que se había cometido un asesinato y que ella era una testigo.

Esta versión también la ha sostenido quien fuera su pareja por aquel momento en verano de 2021. "Solo escuchaba golpes, golpes, golpes", quien vio a los acusados "limpiando" en el rellano sin saber lo ocurrido.

"Pensaba que estaban reventando una pared, o que estaban intentando robar en un piso y estaban reventando una puerta", ha añadido la expareja de la vecina.

En el juicio, en el que la Fiscalía pide 24 años de prisión para las dos gemelas y para la pareja de una de ellas por presuntamente haber planificado y ejecutado el asesinato del novio de la otra hermana, también ha declarado un agente de los Mossos d'Esquadra. En su caso, vio una pata de cabra y una de las fundas con restos de sangre. "En ese momento no preguntamos. Isaac sí nos acompañó, colaboraba y estaba tranquilo".

No obstante, cuando vieron la cantidad de sangre, los agentes se dieron cuenta de que no se trataba de un robo. "Nos encontramos justo a la entrada el cuerpo de una persona cubierto por una manta. Vimos el cuerpo, el móvil, la sangre, solicitamos asistencia sanitaria y nos aseguramos de que dentro no hubiera nadie más".

Este agente estuvo principalmente con las acusadas. "Contestaba Dolores y Pilar intentaba modificar lo que decía. Dominaba el relato de Dolores. Estaban tranquilas", añade el mosso, que recuerda encontrarse la cama de matrimonio sin sábanas y la televisión encendida.