El Ayuntamiento de Barcelona ha cambiado los protocolos de jardinería tras la caída de la palmera que mató a la joven Shamira en el barrio del Raval. A partir de ahora regará una vez por semana las datileras similares a la que se partió la semana pasada, un total de 914 ejemplares.
Así lo ha confirmado Joan Guitart, jefe de gestión de arbolado de Parques y Jardines del consistorio barcelonés que esta semana ha empezado a revisar unas 900 palmeras con características similares a la que se fracturó.
Del centenar que llevan revisadas desde el lunes, ya han talado ocho datileras. "Estamos siendo más estrictos con los criterios y ante la mínima duda, la talamos" explican.
La revisión es minuciosa: "Los técnicos evalúan el grado de estrechamiento del tronco, el nivel de estrés hídrico y el estado de los nidos de cotorras", ha explicado Guitart. También hacen un test de oscilación, es decir, la hacen bailar para ver el riesgo que corre de partirse en dos como la de la semana pasada.
También han empezado a regar las datileras de la ciudad, un total de 914. Aún no se ha publicado el informe de las causas que provocaron que una palmera se partiera en dos y causara la muerte de una joven de 20 años en el barrio del Raval de Barcelona. Pero, según técnicos de Parques y Jardines, todo apunta a la falta de agua como causa de la caída.
El Ayuntamiento de Barcelona activó en marzo el protocolo por la sequía que vive Cataluña en situación de excepcionalidad y el riego de árboles y plantas se limitó a la supervivencia de los ejemplares.