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Un hombre de 31 años, con antecedentes policiales, ha sido detenido en Granada después de introducirse a la fuerza en una vivienda. El delincuente se metió en la casa y la inquilina escapó por miedo a la que la agrediera; poco después los agentes lo arrestaron mientras estaba acostado en la cama de la mujer con su bata puesta. Además se había tomado la cena que la mujer acababa de preparar, según ha informado la Policía Nacional.
El incidente ha ocurrido en una vivienda de la zona Norte de Granada, donde el ahora detenido se coló tras llamar a la puerta y abrirle la inquilina, que escapó asustada. A la casa acudieron los agentes y también los bomberos para acceder desde el patio, porque el individuo cerró la puerta principal con la llave por dentro.
Los agentes localizaron al hombre tumbado en la cama y vestido únicamente con la bata de la mujer. Según se supo a través de la víctima, se cenó además la sopa que había preparado poco antes de que llamaran a su puerta.
El individuo detenido había repetido el mismo modus operandi hace dos días cuando se introdujo en otra vivienda de la misma zona, un piso compartido por estudiantes, en el que entró aprovechando el descuido en la salida de uno de los jóvenes.
Uno de los chicos que vive en la casa se lo encontró por el pasillo e intentó echarlo, pero el detenido se encerró con pestillo en una de las habitaciones, donde los agentes lo encontraron acostado en la cama con un calefactor de aire encendido sobre el pecho.
El hombre, de nacionalidad española, tiene un amplio historial delictivo por estafas, hurtos, robos con fuerza, daños y allanamientos de morada. En 2024 fue arrestado hasta en 11 ocasiones y en lo que va de año ya van tres, según la Policía Nacional.
El primer arresto de este año se produjo cuando fracturó una de las puertas de seguridad del Hospital Virgen de las Nieves de Granada para poder acceder a sus instalaciones. A su llegada, los agentes lo encontraron acostado en una de las camas de la octava planta.
Fue detenido por un delito de daños, dado que la reparación de la puerta por la que accedió asciende a más de 2.300 euros.
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