Los narcotraficantes no paran y buscan constantemente nuevas vías para sus operaciones en el Campo de Gibraltar y también en el entorno del Guadalquivir. El río se ha convertido en una autovía y es ya una de las entradas principales de la droga en el país, según informa Antonio Bernal.

Los vecinos del municipio sevillano de Coria del Río piden más vigilancia puesto que los delincuentes han tomado sus aguas y sus calles. Allí se incautó, hace dos meses, el mayor alijo de cocaína introducido en España en narcolanchas.

"Pasan y, como no hay nadie, hacen lo que les da la gana", asegura un ciudadano, mientras que otro reconoce que "es un coladero". Por ello, el Ayuntamiento de Coria del Río exige al Ministerio del Interior que blinde el Guadalquivir ante el auge del tráfico de cocaína.

Los vecinos están cansados del continuo paso de narcolanchas por el estuario y afirman que es una escena que los menores presencian prácticamente a diario. "Se están cachondeando de las fuerzas públicas", denuncia un hombre.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) reclama más recursos humanos y materiales y teme que se repita otro episodio como el ocurrido hace justo un año en la localidad gaditana de Barbate.

Además, los habitantes lamentan que los pueblos de la zona se conozcan a nivel nacional por el tema de la droga. Un problema que empieza a ser insostenible para los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que se juegan la vida en cada intervención.

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