Salvan a una raya gigante de más de 120 kilos atrapada en Rota, Cádiz
Un ejemplar gigante de "chucho negro", más conocido como raya, quedó varado en el interior de uno de los corrales naturales
El animal, de más de 120 kilos, no podía respirar al no tener agua suficiente por la bajada de la marea
En solo cuatro días, han aparecido tres ejemplares de raya de grades dimensiones merodeando por esa zona, algo habitual de la época
Los Corrales de Rota son el primer monumento natural declarado en Andalucía bajo la protección de esta figura ambiental. Están situado en la costa de Cádiz y comprenden una pequeña franja de océano y playa frente a los municipios de Rota y Chipiona.
Unas preciosas parcelas usurpadas al mar y que permiten el arte tradicional de aprovechamiento de los recursos pesqueros. Los corrales de pesca son parcelas delimitadas y en Rota hay un total de 8.
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Pues bien, en uno estos corrales hace unos días aparecía atrapado un ejemplar enorme de raya: "quizás sea uno de los ejemplares mas grandes hallados en nuestras costas, con 2,5 metros de longitud y casi 1,90 metros de diámetro" dice Andrés Barba, miembro de la Asociación Los Corrales de Rota.
Andrés y otros miembros de la asociación no daban crédito a lo que estaban viendo. El enorme animal de unos 120 kilogramos de peso había quedado atrapado en el corral porque la marea estaba demasiado baja. "Ha sido mala suerte, entró en la charca más pequeña y no tenía agua para respirar", dice David Campos, Presidente de la asociación.
Los corraleros, que así se conoce a los pescadores de la zona, se encontraban realizando labores de despesque cuando se produjo el avistamiento.
Proporcionaron agua al animal durante horas
Todos dejaron lo que estaban haciendo. Había que salvarle la vida al animal, así que con las herramientas de las que disponían se dedicaron a echar todo el agua que podían sobre esa raya gigante.
"Le hemos salvado la vida", dicen orgullosos después de haber estado junto al animal atrapado durante casi cuatro hora. Eso, y la subida de la marea hicieron que la raya pudiera volver a moverse: "le hicimos un canalón para que pudiera salir y cuando subió la marea todo lo necesario para cubrirla, se fue" cuenta David aliviado.
Tres ejemplares en cuatro días
La protagonista de la historia ronda los 120 kilogramos, algo fuera de lo común, pero lo más llamativo es que justo al lado pudieron ver a otra raya también de grandes dimensiones, aunque esta vez "solo" pesaba unos 70 kilogramos.
Pero por si esto fuera poco, tal y como muestra Andrés Barba en sus redes sociales, dos días más tarde la historia se repite. Otra raya de más de 80 kilogramos les hace una visita. "Esto es más habitual de lo que parece, los peces están en época de paso y suelen parar por aquí" dice el Presidente de la Asociación Los Corrales de Rota.
Un monumento natural en la costa andaluza que estos días está recibiendo visitas de gran envergadura.
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