Karim El Baqqali, acusado del asesinato de los guardias civiles de Barbate, se niega a declarar: buscan a tres compinches

El conductor de la narcolancha que provocó la muerte de dos agentes de la Guardia Civil en Barbate, Cádiz, ha sido detenido muy cerca de la playa en la que se produjo la embestida mortal. Identificado como Karim El Baqqali, de 32 años, su arresto pone fin a siete meses de exhaustivas y complejas investigaciones, aunque aún siguen las pesquisas en busca de tres de sus compinches, que estarían fuera de España, como informa en el vídeo Tatiana Dominguez.

Según la Guardia Civil, su detención ha tenido lugar esta madrugada entre la 1 y las 3:00 horas en una playa próxima al lugar donde se produjeron los hechos el pasado 9 de febrero. Creen que fue él el que pilotaba la narcolancha que arrolló mortalmente a los dos guardiaciviles. Por eso, a él le imputan dos delitos de asesinato.

Karim El Baqqali, no obstante, no iba solo en esa narcolancha. Lo acompañaban tres personas más, y para ellos ya se han dictado órdenes de arresto internacional.

El detenido permanece ahora en la Comandancia de la Benemérita en Cádiz y, por el momento, no ha querido declarar.

En ese contexto, mañana, previsiblemente, pasará a disposición judicial.

El arresto de Karim El Baqqali se ha materializado después de que la investigación del asesinato de los dos guardiaciviles arrollados por una narcolancha en Barbate diese un giro de 180 grados.

En un principio, los agentes de la Benemérita arrestaron a Francisco Javier M. P., alias ‘Kiko el Cabra’ como el presunto conductor de la narcolancha que embistió y mató a los agentes, David Pérez y Miguel Ángel González. Junto a él arrestaron a cinco hombres que estaban en su embarcación, detenidos también horas después de que se produjeran los hechos aquel 9 de febrero.

No obstante, en sus declaraciones todos ellos negaron que su narcolancha fuera la que embistió a los agentes y sostuvieron que, prueba de ello, era que uno de ellos había grabado a distancia la escena con su móvil y que su embarcación tenía dos antenas y cuatro motores, no como la que mató a los agentes.

A ese respecto, el pasado mes de mayo los investigadores de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y de la Policía Judicial de la Comandancia de Cádiz comprobaron que decían la verdad, que fue otra la narcolancha que arremetió hasta seis veces contra la patrullera.

No obstante, ‘Kiko el Cabra’ y sus tripulantes siguieron en prisión, ya no acusados de los asesinatos, pero sí por delitos de contrabando y relación con organizaciones del narcotráfico, por los que el juez y la Audiencia Provincial denegaron reiteradamente su puesta en libertad provisional.

No sería hasta alcanzar un acuerdo con la Fiscalía cuando, tras aportar datos “reveladores” que estrechaban el cerco sobre Karim, cuando la autoridad judicial los dejó en libertad, pese a que sobre ellos siguen las diligencias por delitos de contrabando, pertenencia a organización criminal, resistencia y desobediencia.

Ahora, tras el arresto de Karim El Baqqali, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha interesado este jueves al Juzgado de Instrucción número 1 de Barbate (Cádiz) su participación en cuantas diligencias se deriven de la detención del presunto autor del asesinato de los dos agentes.

En ese sentido, recuerdan que el secreto de las actuaciones "decayó hace días" y "deben preservarse los derechos de las acusaciones a participar en el proceso penal".

A través de una nota, la asociación ha considerado también una "magnífica noticia" su detención, que "demuestra el arduo trabajo" que han realizado los agentes de la Guardia Civil, subrayando el hecho de que "los responsables de estos actos vayan a ser llevados ante la justicia".

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