El asesinado en un chalé de Estepona tenía documentación falsa y no era belga
La víctima muerta por un disparo en la fiesta en una vivienda en Estepona era de origen serbio
Autoridades de Serbia han confirmado que el fallecido habría sido vinculado con un grupo criminal de los Balcanes
El lunes 12 de agosto se celebró el evento, que "se fue de las manos" con el asesinato "en el patio"
Novedades en el caso del hombre hallado muerto en un chalé de Estepona (Málaga). El avance de las investigaciones ha permitido averiguar que tenía documentación falsa. No era belga, como se apuntó al principio.
Aunque el fallecido portaba un pasaporte de Bélgica, los agentes detectaron indicios de que podía tratarse de una falsificación. Por tanto, mandaron analizar las huellas dactilares para conocer su auténtica identidad.
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Ya han obtenido el resultado y, según publica el diario Sur, la víctima era un ciudadano serbio. Las propias autoridades de su país lo han confirmado. También que habría estado vinculado a un grupo criminal de los Balcanes.
Los investigadores, que han contado así con colaboración internacional para aclarar este suceso, siguen buscando información sobre su pasado. Ya que podrían estar implicados en su muerte posibles enemigos.
El hombre recibió un tiro mortal por la espalda en el inmueble ubicado en la calle Hortensia del municipio. Durante la noche se había estado celebrando "una fiesta privada", tal y como nos contó el propietario de la vivienda.
A los micrófonos del programa 'Vamos a Ver' declaró que "se fue de las manos". La reportera pudo acceder incluso al lugar donde fue encontrado, en un charco de sangre, el individuo: "El patio".
"Se fue en un coche oscuro", detalló el dueño
El mismo dueño del chalé aseguró que el presunto autor del disparo "se fue en un coche oscuro" del lugar. "Yo lo escuché, estaba en el bar y cuando salí no vi nada", señaló también.
"Vi al difunto tirado en la escalera, pensaba que le había dado algo por consumir", reconoció. Inmediatamente después observó al vehículo abandonar la zona, aunque otras personas han dicho que era blanco.
Desde el inicio, los agentes trabajaron con la hipótesis de que víctima y fallecido habrían tenido un encuentro fortuito en la celebración. Se pudo producir un malentendido, que derivaría en el crimen.
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