Comienzan las declaraciones de los mandos militares investigados por la muerte de dos soldados en Cerro Muriano
Tras estas declaraciones, el juez dictará auto de procesamiento contra los investigados que considere
Un informe de la Guardia Civil pone de manifiesto que las medidas de seguridad no eran suficientes
Piden el cese de actividad del teniente investigado por el suceso de Cerro Muriano, en Córdoba
El Tribunal Togado Militar Central número dos de Madrid acoge desde este martes y hasta el próximo jueves las declaraciones de siete de los mandos de la base militar de Cerro Muriano (Córdoba) que están siendo investigados por la muerte de dos soldados durante unas maniobras realizadas en diciembre del pasado año.
Concretamente, este martes el juez militar tomará declaración este martes a primera hora a tres testigos antes de que presten testimonio, sobre las 11.00 horas, un teniente y el capitán responsable directo de los ejercicios en los que fallecieron ahogados los dos militares, maniobras que consistían en el cruce de un lago y que se realizaron a temperaturas muy bajas.
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Posteriormente, el miércoles, desde las 9.00 horas, está prevista la declaración de cuatro altos mandos aforados, concretamente dos coroneles, un teniente coronel y un comandante, que formaban parte de la cadena de mando de la Brigada Guzmán el Bueno X, con base en Cerro Muriano.
Se tratan de los altos mandos que ejercían responsabilidades en la base cordobesa cuando se aprobó y se puso en marcha el Programa Básico de Instrucción sobre el que se basaron las maniobras mortales.
Finalmente, el próximo jueves, sobre las 10.00 horas, prestará testimonio el sargento investigado que era el responsable de la instalación de la cuerda que debía servir de guía para cruzar el lago con las adecuadas medidas de seguridad.
Fin de la instrucción
De esta manera, con estas declaraciones se pondría fin, previsiblemente, a la fase de instrucción del caso a falta de que el juez dicte su auto de procesamiento en su caso contra los investigados que considere oportuno, además de los escritos pertinentes que aporten tanto la Fiscalía Militar como la acusación particular en nombre de los familiares de los soldados fallecidos.
Durante toda la fase de instrucción ante el juez militar de Madrid, tanto militares que participaron en las maniobras, como peritos e investigadores de la Guardia Civil constaron que los ejercicios de realizaron con escasas medidas de seguridad.
Concretamente, un informe de los Grupos de Especialistas de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) elaborado tras la inspección del lago de la base de Cerro Muriano (Córdoba) ha puesto de manifiesto que las medidas de seguridad de las maniobras mortales no eran suficientes.
Además, el informe apunta que las maniobras acuáticas en las que fallecieron los dos militares "carecía de las necesarias medidas de seguridad", principalmente en cuanto a la falta de ambulancia, personal sanitario y la "cuerda" que supuestamente servía de "línea de vida".
Por otro lado, los testigos que han declarado ante el juez instructor, tanto militares como peritos, han señalado que solo había "instrucciones generales en relación con las maniobras", pero "no concretas" sobre el cruce del lago.
Delito contra la eficacia del servicio
Han añadido en su declaración que "solo había una única ambulancia operativa" y que los encargados de la logística de las maniobras "no recibieron esa mañana" del suceso "ni el día anterior" ninguna "llamada ni información" por parte del capitán encargado de los ejercicios.
Los testigos han asegurado que un sargento que también participó en el montaje de la cuerda "tampoco tenía titulación específica para montarla" y que, una vez realizada su instalación el capitán le preguntó "si cubría" el agua, y al responder afirmativamente dicho sargento le expresó la preocupación de tener que "lanzarse a un rescate", a lo que el capitán respondió: "esperamos que no".
Asimismo, los testigos incidieron en que la temperatura del agua donde se realizaron los ejercicios era "extremadamente fría", mientras que en esa zona del lago "no se daba pie", algo que los soldados, cabos y sargentos de otros pelotones y secciones "no sabían".
En un principio, los investigados podrían haber incurrido en un delito contra la eficacia del servicio, que se produce cuando el militar incumple sus deberes fundamentales causando "grave daño en los medios o recursos de las Fuerzas Armadas o en las personas, o riesgo para el servicio o para la seguridad de una fuerza, unidad o establecimiento de las Fuerzas Armadas".