Un extraño ruido continuado alertó a los funcionarios de la prisión algecireña de Botafuegos. Tras vigilar de dónde procedía ese sonido, ven cómo el dron llega hasta la ventana de una celda y desaparece. Es ahí cuando acuden a la celda en la que sospechan ha entrado el aparato. Allí cachean al interno y encuentran una tableta de hachís de 100 gramos, tres móviles y un cargador.
Según publica La Voz de Cádiz, el interno de la celda en la que encuentran el material introducido por el dron, cumple más de 14 años de prisión por una amplia trayectoria delictiva, penal y penitenciaria.
El sindicato ACAIP, Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias, alertan que no es la primera vez que los trabajadores de esta cárcel de Botafuegos detectan intentos de introducir sustancias estupefacientes en el interior. Tras el suceso del dron, requisaron a otro preso 218 pastillas de trankimazin ocultas en vía rectal al cachearle tras una comunicación de ese interno con un familiar.
En otra ocasión se le incautó 15 papelinas de cocaína, 5 gramos de hachís y 32 pastillas de trankimazin a otro preso cuando ingresaba de forma voluntaria en prisión para cumplir una pena privativa de libertad de 9 meses.
Desde ACAIP, que es el sindicato mayoritario del sector, piden más medio ante estos casos, al detectar un incremento en los intentos de introducir droga en esta prisión algecireña. También insisten en los problemas que ocasionan estas sustancias tóxicas en las cárceles, ya que van aparejadas a conductas violentas, agresiones, peleas y amenazas, situaciones que ponen en riesgo a los trabajadores y trabajadoras de las prisiones, así como a otros presos. Insisten en la necesidad de más recursos humanos, más medios materiales y más inversiones que garanticen la seguridad.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.