Las colmenas de abejas que deciden instalar su hogar en zonas que pueden suponer un riesgo para la población suelen ser retiradas. Sin embargo, los ayuntamientos no tienen "la obligación legal" de ocuparse de estas tareas de rescate.

Aunque algunos sí que las realizan, con la ayuda de apicultores como vimos en el reciente caso en Fuengirola (Málaga). A veces, son otros efectivos de emergencias los que se encargan, equipándose con trajes especiales.

Pero en el municipio de Cúllar Vega (Granada), el consistorio ha optado por ir un paso más allá. Acaba de firmar un acuerdo de colaboración con un conocido vecino para que sea él quien lleve a cabo la retirada de enjambres.

Esos que sean localizados en zonas privadas, como casas o fincas particulares, y en espacios públicos, como parques u otras instalaciones. Gracias al trabajo del apicultor Sergio Guerrero, la localidad es una de las primeras de España que ofrece este servicio público.

De manera totalmente gratuita, rescatará las colonias que aparezcan para reubicarlas en lugares donde no causen problemas a las personas. Guerrero acostumbra a subir vídeos a sus redes sociales mostrando su labor. Algunos se han hecho virales.

Por ejemplo, el que tuvo casi 700k de visualizaciones en su perfil de TikTok. Encontró una colmena con "entre 45.000 y 65.000 abejas", según sus cálculos, que se había formado en un olivo ubicado precisamente en Cúllar Vega.

Fue el mismo alcalde del pueblo, Jorge Sánchez Cabrera, el que avisó al joven apicultor en aquella ocasión. Dado que siempre "presta un magnífico servicio a sus vecinos cada vez que lo necesitan", ambas partes han decidido ahora colaborar.

"Hemos gestionado más de cinco rescates anuales de la mano de este gran profesional", cifra el regidor. Incluso él ha asistido y ayudado a Guerrero en la retirada de algún enjambre ya. El objetivo que buscan es "darles a las abejas un hogar más confortable".

El joven cullero creó con esta finalidad su asociación llamada 'La Colmena Sanadora' para salvar a estos insectos. Recuerda que son muy importantes para el planeta, por lo que nunca hay que matarlos, al descubrirse una colonia.

Ya se ha topado con casos de todo tipo. Es decir, ha intervenido para trasladar enjambres ubicados en el interior de viviendas, recintos de compostaje, cajas de registros telefónicos, etcétera.

Para el alcalde de Cúllar Vega, "sí hay una obligación moral de cuidar el papel de las abejas, fundamental para la vida". Por eso ha puesto en marcha la colaboración con el apicultor, a pesar de que el servicio no esté entre las obligaciones de la administración.

E insiste en el "excelente trabajo que realiza" Guerrero, también al "poner sus conocimientos a disposición de todos los vecinos y vecinas". Además de "velar por la conservación" del himenóptero.

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