Dos futbolistas del equipo El Palo B han sido condenados a cuatro años de cárcel por apuñalar a un jugador de 24 años, del club Alhaurín de la Torre B, tras un partido de ambos celebrado el 20 de marzo de 2016 en Málaga. La sentencia ha sido dictada por la Audiencia Provincial después de que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) decidiese repetir el juicio por considerar que el anterior magistrado presidente se “excedió con creces” en la dirección de los debates y preguntas.

Con respecto a la anterior sentencia, ambos jugadores -de 28 años- han tenido una rebaja muy importante debido a la conformidad de los acusados y sus defensas y la estimación de la circunstancia atenuante de reparación del daño. Tal y como adelantó el ‘Diario Sur’, los acusados ya han pagado casi la totalidad de las indemnizaciones a las víctimas.

Una vez que el TSJA anuló la sentencia, en la que fueron condenados a 20 años de prisión, se ordenó un nuevo juicio con un tribunal de composición diferente. Así, con esta nueva condena, ambos tienen prohibido acercarse al domicilio de la víctima, lugar de trabajo o zona que frecuente a una distancia inferior de un kilómetro y la prohibición de comunicarse con el mismo por cualquier medio durante diez años. Uno de los procesados era el capitán del equipo de El Palo B.

Los hechos ocurrieron el día en que se disputó un encuentro de Tercera Regional entre El Palo B y el equipo de Alhaurín de la Torre en el campo de fútbol de la barriada malagueña del Palo. El futbolista agredido sufrió dos puñaladas que le afectaron al tórax y otra cerca del corazón. El afectado precisa de valoraciones periódicas de su estado cardiológico debido a que su cicatriz puede provocarle arritmias, trombos e insuficiencia cardíaca. La sentencia subraya que, de no haberse realizado tratamiento quirúrgico urgente, "con seguridad habría fallecido".

Durante el partido, hubo tensión entre el capitán del equipo del Palo y la víctima, también capitán del otro equipo. El procesado “tomó una actitud desmedida de agresividad” hacia el contrincante y lo amenazó de muerte en varias ocasiones. “Te voy a matar”, “¿Ves los minutos?, “Cuando pasen los minutos te mato, nos vamos a ver fuera, te esperaré”, son algunas de las frases que recibió el afectado.

Dicho acusado se dirigió de nuevo hacia la víctima en el minuto 61 para propinarle un cabezazo y derribarlo. El jugador fue amonestado y sustituido poco después por otro futbolista. El procesado se quitó la camiseta oficial y se quedó en las zonas de las gradas, donde se encontraban amigos suyos y el otro varón condenado, que también era jugador pero que no había sido convocado para el partido. Ambos se pusieron de acuerdo para matarlo cuando finalizase el encuentro.

Tras conseguir la victoria el equipo de El Palo B, el capitán fue invitado por el cuerpo técnico de su equipo para que saliese al campo a celebrar la victoria junto al otro procesado, pese a que no había jugado. Cuando la víctima estaba felicitando a los jugadores, uno de los condenados lo agarró por el cuello, lo inmovilizó y con una navaja lo apuñalaron dos veces. El Comité de Competición de la Federación Malagueña decidió retirar la licencia de los dos jugadores en abril de 2016.