Fernando, lateral de la selección española de fútbol de talla baja: "Es bueno que los niños lo vean"

  • Seis andaluces forman parte de este equipo nacional de fútbol adaptado a personas de menos de metro y medio de estatura

  • Aunque en inglés se denominan como 'enanos', en España y otros países usan conceptos como personas 'de talla baja' o 'pequeñas'

  • En 2023, la selección competirá en los Juegos Olímpicos adaptados a esta modalidad y en el mundial de la especialidad

España es una potencia mundial en deporte y, concretamente, en fútbol. Además de los jugadores famosos y millonarios, hay un equipo que representa a nuestro país y que, además de ser muy bueno, realiza una labor de visibilización muy importante: el equipo español de talla baja.

Este particular grupo de futbolistas mide entre 1,42 y 1,49 metros y, en su mayoría, está formado por personas con acondroplasia, un trastorno genético que se traduce en una estatura más baja, además de otros rasgos en cuando a la estructura ósea. Es la principal causa de enanismo en el mundo.

Fernando González Abad, sevillano, es uno de los miembros de la selección española de talla baja. Gran aficionado del Real Betis, se encarga de poner "la finta y el esprint" en la banda cuando juega. El primer fin de semana de junio participó en una concentración del equipo en Francia, donde disputaron un amistoso frente a la escuadra local.

En su denominación, España ha optado por tratarse como personas de "talla baja", mientras que los franceses han preferido "personas pequeñas". Esto dista de otros países, donde usan la palabra dwarf, que, traducida del inglés, significa de manera literal enano. "Nosotros intentamos quitarnos el estereotipo. Literalmente es así, pero en otros países no es tan peyorativo como aquí, se entiende de otra manera", explica Fernando a NIUS.

El equipo se constituyó hace cuatro años y, en este tiempo, ha avanzado hasta ser el mejor de Europa el pasado año en un campeonato celebrado en Murcia. Gracias al apoyo de la federación de fútbol murciana y a la difusión en redes, cada vez tienen mayor reconocimiento, algo que destaca en positivo González. "Hay más apoyo de la gente y es bueno que los niños lo vean. En Francia había niños allí y eso ayuda a que no lo vean como algo distinto. Me gusta que cuando haya partidos vengan, se hagan fotos y pregunten porque se da visibilidad y eso es importante".

A nivel particular, Fernando se esfuerza en la difusión de su enfermedad e intenta darla a conocer y alejarla de clichés, además de luchar por la ansiada inclusión que los pacientes de acondroplasia demandan. Iniciativas como la selección de talla baja ayuda a acercarse a ella.

Él no es el único andaluz del equipo. Desde Cádiz hasta Jaén, buena parte de la comunidad tiene representación. Tanto es así que, en la última cita, fueron seis los andaluces convocados: Alberto Ruiz (Palomares del Río, Sevilla), Miguel Soriano (Arjonilla, Jaén), David Ibáñez (Puerto de Santa María, Cádiz), David Velasco (Jaén) y Jesús Sánchez (Badolatosa, Sevilla). También viajó Paco López, de Almería, exjugador ya retirado, muy querido y que sigue vinculado al equipo. Igualmente, aunque no viajó, Manuel Serrano, de Torremolinos, es habitual en las concentraciones.

A por el Mundial

Este fútbol diferente tienen sus reglas adaptadas. Se juega en equipos de siete en cancha de fútbol sala y en dos tiempos de 20 minutos cada uno. El equipo español, en las grandes citas, luce camisetas proporcionadas por la federación española, aunque no tienen vinculación directa con ellos.

En 2023 hay dos objetivos marcados en rojo en el calendario del equipo. El primero está en Alemania con los World Dwarf Games, unos juegos olímpicos para personas de talla baja. A finales de año viajarán a Argentina, el equipo más fuerte del mundo, para disputar el mundial de la especialidad. Optimista, Fernando asegura a NIUS que dentro del equipo "se están viendo brotes de poder hacer algo importante".