"Después de la tormenta siempre llega la calma", dice un refrán que invita al optimismo en situaciones adversas. Se puede aplicar en el caso de las Salinas del Cabo de Gata (en Almería), que han recuperado vida.
En NIUS ya contamos en el verano del 2022 los problemas que estaba sufriendo por la falta de agua. A la sequía se sumó la rotura de una tubería que las conectaba con el mar.
Algo que llevó a los vecinos incluso a llenar con 'cubazos' el humedal almeriense. Miles de aves migratorias lo usan como parada obligatoria en sus viajes entre Europa y África.
Por lo que el entorno natural debe tener agua. Ya la tiene. "Tras meses de desecación", vuelve a lucir su "imagen icónica" también con "la llegada de miles de animales".
Así lo ha confirmado la Junta de Andalucía este jueves, a través del consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco.
Ha visitado la zona e incluso grabado un vídeo desde allí, donde se ha registrado una "cifra histórica" de fauna, con más de 2.200 ejemplares. Supone "el mejor abril" en cuanto al número y en 14 años, "desde el año 2009".
Del informe de seguimiento periódico de aves acuáticas que elabora la Consejería se ha extraído el dato. Igualmente se han detectado que se corresponde con 25 especies distintas.
"Demuestran la recuperación del humedal y evidencian que todos aquellos agoreros de los mensajes catastrofistas, o no sabían de lo que hablaban o tenían un marcado interés electoralista", ha criticado el consejero.
Los técnicos de su departamento han informado de que el pasado mes fue el "punto de inflexión" en ese sentido. El espacio ha dejado atrás el periodo de desecado sufrido, que llevó a ecologistas a alertar de ello.
"Las cuotas de abundancia de las poblaciones de aves acuáticas han llegado a alcanzar niveles usuales", ha recalcado Fernández-Pacheco respecto a la situación ya normalizada de las salinas.
"Tanto es así que la cantidad total se ha llegado a multiplicar por seis desde el mes anterior de marzo", ha comparado. En cuanto al número de especies que aterrizaron allí, "es muy similar al de abril del 2022".
Por aquel mes todavía no se había producido la avería en la entrada de agua al humedal. Entonces se registraron 28 especies diferentes, mientras que en 2021 hubo 23.
De cara a próximos retos, desde la Consejería buscan aumentar la nidificación en el paraje natural. Aves que lo elijan para reproducirse, ya que la tendencia ha ido a la baja desde 2010 en este proceso.
"Es una apuesta firme y decidida que, además redunda en espectáculo para la vista. En atracción de visitantes y amantes de la naturaleza", ha matizado.
Además, cuenta con un proyecto presupuestado, por lo que "no es una mera declaración de intenciones". La Junta de Andalucía recuerda que el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar está protegido desde 1987. Fue el primer espacio marítimo-terrestre que se declaró así en la región andaluza.