{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Tenía solo ocho años cuando Javi Franco, con síndrome de Down, empezó a seguir a la Virgen de los Dolores en la Semana Santa de Huelva. Se ponía su costal y se colocaba en la pata derecha delantera... pero por fuera. El 'Niño', como todos le llamaban en la Hermandad de la Lanzada, no era costalero... aunque durante más de 40 años soñó con serlo.
El pasado mes de enero, Javi falleció con 53 años. "Es una Semana Santa muy triste para todos", dice Héctor Pallares, que solía acompañarle cada año junto a la imagen de Nuestra Señora de los Dolores. "Al principio iba con él su padre, pero desde que falleció le acompañaba yo", explica Héctor, al que Javi consideraba como un segundo padre.
"Siempre estábamos dos o tres arropándole", dice Héctor, mientras Javi iba dando ánimos y abrazando uno a uno a los costaleros que salían del paso en los relevos. Solo cuando la Virgen se recogía, Javi dejaba la pata derecha delantera y se metía dentro del paso por la parte trasera.
"Javi se ponía justo debajo del manto", recuerda ahora Héctor. En esa parte del paso no había trabajaderas que alcanzara con su metro cincuenta de estatura... "Quítate de ahí", le solían decir desde fuera. Pero él nunca molestaba y al final era el capataz el que siempre decía que lo dejaran.
La presencia de Javi era ya una tradición en esta hermandad de Huelva donde todos le conocían. "Aquí todos le querían mucho", dice Héctor. Por eso este año entre ajetreo y preparativos propios de la Semana Santa, también se cuelan ríos de lágrimas y homenajes a Javi.
El último se lo hicieron en casa de su madre, María, de 90 años. El Hermano Mayor de la Hermandad, Juan Romero, le hizo entrega de un cuadro con la Virgen de los Dolores a un lado y la otro la foto de su hijo. En medio, había una carta que le escribió el exalcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, el día que murió el 'Niño'.
La madre de Javi no sabe leer, fue Héctor quien con un nudo en la garganta le leyó en voz alta las palabras de Pedro: "Hay gente que se muere y gente que se nos muere... tú te nos ha muerto para tu madre, tu familia, tus amigos, tu barrio, tu Hermandad… Creíamos que no, que, a pesar de la corta esperanza de vida de los 'niños' como tú, ibas a durar siempre... y no, también se muere la gente tan genial como tú".
Este no ha sido el único homenaje que ha recibido la madre de Javi, que ya fue nombrado costalero de honor de la Hermandad de la Lanzada. Antes de su salida por el barrio este Viernes de Dolores, la cuadrilla de costaleros a los que el 'Niño' siempre abrazaba han querido dedicarle a María una levantá privada. "No me hagáis llorar mucho", decía la madre de Javi, incapaz de aguantar las lágrimas.
El último adiós al 'Niño' tiene forma de placa, la que han colocado los propios costaleros en el mismo lugar donde Javi siempre estaba... Esa pata derecha delantera donde un niño creció soñando con el costal, hoy se ha quedado huérfana.