El mundo del ciclismo cuenta los días para el comienzo de la tercera Gran Vuelta de la temporada 2022, la Vuelta Ciclista a España. Lo más selecto del pelotón internacional recorrerá las carreteras españolas entre agosto y septiembre, con protagonismo de Andalucía un año más. Todos tienen sus favoritos y el marbellí Luis Ángel Maté es uno de los corredores más carismáticos de la carrera, pero este año dará otro motivo más para que todos le apoyen.
La difícil situación vivida este verano en España con la gran cantidad de incendios iniciados a lo largo del verano ha dejado un paisaje desolador con miles de árboles quemados. Andalucía ha sido uno de los territorios más afectados y más aún la zona de la provincia de Málaga. Es ahí donde nación Luis Ángel Maté, quien ha decidido aprovechar que es un corredor de fugas y su gran sensibilidad para poner en marcha una iniciativa muy verde. El de Marbella donará un árbol por cada kilómetro que haga en fuga a lo largo de La Vuelta para reforestar la zona de Sierra Bermeja, en el término municipal de Estepona.
A Maté, que lleva toda la vida entrenando toda su vida por la zona, le duele ver el paisaje quemado, por lo que ha decidido emprender esta campaña. "Tengo miedo de no coger ninguna escapada, por eso de entrada he puesto 100 árboles", asegura entre risas Luis Ángel a NIUS. La idea se le ocurrió "montando en bicicleta, como todas mis buenas ideas" y, lejos de lo que pueda parecer, entrenando en Sierra Nevada. La iniciativa es muy de su estilo, ciclista al que le gusta meterse en escapadas y luchar por etapas en pequeños grupos, además de que "es un placer escaparse en una carrera como La Vuelta".
El primero en saberlo fue Javier Guillén, director de la carrera, y luego se lo comentó al Ayuntamiento de Estepona. "A ambos les pareció genial y luego lo comenté en mi equipo y todos arrimaron el hombro", asegura el corredor del Euskaltel Euskadi. A sus 38 años corre su undécima Vuelta y no ha perdido el hambre ni la ilusión, aunque reconoce que las escapadas ahora son "más difíciles" porque "los equipos juegan más a la defensiva, mandan poca gente a las fugas", pero se muestra "optimista" ya que es "fiel a mi estilo y al de mi equipo". No obstante, parte con buena perspectiva, pues en su preparación en la Arctic Race en Noruega hizo una escapada de nada menos que 138 kilómetros.
Maté reconoce haber recibido "una avalancha" de mensajes a raíz de la iniciativa. El marbellí no tenía pensado que nadie más participase, ya que "no quería pedir nada a nadie", pero empresas, asociaciones y personas individuales le han pedido participar de alguna forma, donando árboles o ayudando a plantarlos. "Estoy sorprendido", afirma, "probablemente abramos un crowdfunding para que colaboren y sumen y hacerlo de la mejor manera" ya que "cuanta más ayuda, mejor".
La Vuelta supone una oportunidad única para llevar a cabo una idea de este tipo, ya que la parte final de la etapa número 12 de la carrera circula por las carreteras afectadas y será una oportunidad ya que "llega a todo el mundo". "La carrera es un escaparate para hacer ruido y poner mi granito de arena", comenta, "es una situación que hay que revertir".
Sobre si se podrá culminar con una victoria, Maté se muestra cauto, pero asegura que "para eso hemos trabajado durante todo el año". Su equipo llega como invitado, por lo que "estamos muy motivados" y conseguir un triunfo parcial es para ellos "nuestro objetivo". "Todos tenemos que sumar, son 21 etapas que sin cronos son 19, tenemos 19 oportunidades para intentarlo", sentencia.