Acoso escolar: las denuncias se disparan
Más de 50.000 llamadas se recibieron el pasado año en el 900 20 20 10, el teléfono de ayuda a niños y adolescentes en riesgo, ANAR. Llamadas para informarse o denunciar acoso escolar. La cuarta parte realizadas por las propias víctimas, el 74 por ciento, de sus madres preocupadas. Gracias a esas más de 50.000 llamadas, se detectaron 1.207 casos de acoso escolar, la mayoría sufridos a diario. Un aumento del 87 por ciento en el número de casos, respecto a 2015 y con agresiones más violentas.
Son datos del II informe presentado por la Fundación ANAR y la Fundación Mutua Madrileña, que, explican el aumento del número de casos, “por la mayor visibilidad del acoso escolar, la mayor concienciación de víctimas y entorno” para enfrentarse a los acosadores y buscar ayuda. Una actitud en la que tienen mucho que ver campañas como Se buscan #valientes, de Mediaset España, con (@langui_oficial), o o el apoyo de ídolos deportivos, como Márc Márquez o Dani Pedrosa, con mensajes como “Si ves bullying, se valiente y cuéntalo”, o “El acoso escolar no mola”.
A través de las llamadas telefónicas comprueba que la edad media de inicio son 10 años, pero se han registrado un 14% de casos en menores de 7 años. Una edad en la que la agresión es sobre todo física. Según el director de programas de Fundación ANAR, Benjamín Ballesteros “Esa detección temprana puede ayudar a que el menor no llegue a sufrir el acoso durante tanto tiempo como la víctima suele aguantar en silencio antes de contarlo, 13 meses”
Chicos y chicas sufren casi por igual el acoso en las aulas. Pero cuando se trata de ciberbullying, (1 de cada 4 casos detectados) de los insultos, el aislamiento, la violencia a través de redes sociales, la violencia es de género: dos tercios de las víctimas son mujeres, niñas. Este tipo de acoso resulta más difícil de superar Solo una de cada tres víctimas logra hacer frente a sus agresores, mientras que , si se trata de acoso presencial, hay un 69 por ciento de las víctimas que se enfrenta al acoso.
Los expertos llaman la atención sobre la responsabilidad de los padres en el control del acceso a internet y evitar que menores de 14 años, dispongan de un móvil que les introduce en la redes sociales. Esto les hace vulnerables a sufrir acoso no solo en el centro escolar, sino las 24 horas del día. Muchos adultos ignoran que son responsables penales de lo que hagan sus hijos menores. Y ya hay sentencias judiciales con multas elevadas contra los progenitores de un menor acosador, que ha invadido el espacio privado de otro, su víctima.
Los padres y escolares reconocen que los centros educativos han mejorado mucho. Pero un 53,3 por ciento considera que no hacen mucho, incluidos los profesores, por afrontar la violencia en las aulas. Los expertos piden una Ley de prevención de violencia en las aulas, que obligue a los centros a erradicar el acoso escolar.