Unai Simón y Álvaro Morata. Dos jugadores que han sido carne de meme, de críticas y de recelos. Su rendimiento ha dado pie a ello y el partido de octavos de la Eurocopa pudo convertirse en una tumba deportiva. Pero fue su resurrección.
El histórico partido entre Croacia y España, que terminó con la victoria del cuadro dirigido por Luis Enrique por 3-5, arrancó con dramatismo por el error de Unai Simón. El portero vitoriano recibió un pase de Pedri desde 45 metros y un mal control puso cuesta arriba el encuentro para La Roja. Lejos de verse sobrepasado, el guardameta supo redimirse y evitó con tres grandes intervenciones la posibilidad de caer derrotados cuando todo estaba igualado.
Unai Simón cometió un error grave, pero demostró gran capacidad para sobreponerse ante las adversidades. No todos los deportistas son iguales, el joven portero del Athletic de 24 años supo tirar de entereza y terminó cuajando una gran actuación. Optó por la autoconfianza en lugar de atender a la presión social y se refugió en las personas que más le conocen, sus compañeros. Donde había una crisis vio una oportunidad.
Julieta Paris, psicóloga del deporte especializada en alto rendimiento, reconoce que sufrió al ver a Unai Simón: "No lo va a olvidar jamás, los errores hay que tenerlos en cuenta para no repetirlos. Es mejor enfocarse en lo que queremos conseguir y no en lo que queremos evitar, aunque tras su actuación después el error ha quedado diluido".
Paris, en su trabajo con deportistas, les pregunta cómo quieren jugar y qué titular desean ver al día siguiente. "Y muchos lo clavan". Pero es cierto que errores de este tipo no se pueden repetir, según la especialista: "El mal rendimiento nunca debe justificarse, y creo que Unai se regeneró, pero ahora es importante lidiar con los memes y la maldad social". La experta considera vital la capacidad de mantener la concentración en un momento clave. "En un partido no se debe pensar, sino actuar, responder. Unai tuvo una falta de activación total, y ahí tuvo el error. Los grandes profesionales luchan por desterrar la palabra fácil de su vocabulario", subraya.
Fernando Callejo Muñoz, psicólogo cofundador de UPAD Psicología y Coaching, destaca la resiliencia y la importancia del grupo para sobreponerse en situaciones complejas, como en el caso del portero español.
"Tras cometer el error, en esa situación, hablamos de lo que se llama locus de control. Puede ser (locus de control) externo, es decir, que los factores externos que no puedo controlar, como la presión social o lo que dicen de mí, tenga mayor control sobre mi vida, lo implica convertirse al final en una persona victimista de la realidad, y puede ser (locus de control) interno, es decir, que nos basemos en todo aquello que podemos controlar y sobre lo que podemos decidir, que es de lo que tiró Unai Simón", explica el psicólogo.
"Su autoconfianza se ha visto y se va a ver reforzada. A pesar de las críticas que pueda recibir, se va a centrar en cómo ha superado ese momento crítico. Los futbolistas saben que en el deporte se vive de los errores, y que de los errores se aprende. En este caso también hay un factor muy importante como la resiliencia, la capacidad de adaptación frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos", subraya el especialista.
David De Gea, portero titular del Manchester United, fue el principal aliado de Unai Simón pese a haber encontrado la suplencia en la selección en este torneo. Arropó a su compañero, con quien mantiene amistad, y le aconsejó en un momento duro. "Es solo un gol estate seguro".
"Cuando recibes apoyo de una persona que sabe perfectamente por lo que pasas, que empatiza, es más fácil escuchar y recibir comentarios y consejos. De Gea falló en la final de la Europa League y ha errado con España, es consciente de la presión en la portería. Estoy convencido de que tanto él como la plantilla ayudaron a Unai a reponerse", comenta al respecto el profesor Callejo Muñoz.
Álvaro Morata fue otro de los nombres propios del Croacia- España disputado en el Parken Stadion de Copenhague. Durante las últimas semanas fue duramente criticado por la falta de gol y ante el conjunto balcánico marcó el tanto de la victoria con una acción de gran nivel. Y aunque dijo que no le importaban las críticas, sí le hicieron mella a tenor de algunas declaraciones, sobre todo a las acciones sobre su familia, víctima colateral de las críticas vertidas contra el jugador. Morata, visiblemente molesto, dijo que no le importaban lo que dijeran de él. Pero en el fondo necesitaba reivindicar su valor.
"Estos deportistas están habituados a este tipo de presión social, a pesar de que se generan esos procesos de estrés emocional como se ha podido ver en algunas declaraciones. Si algo ha demostrado Morata es que mantiene un equilibro de intentar que las críticas no le afecten en su juego. El gol es un plus, pero además hay que valorar su participación. La actitud lo marca todo, marca la diferencia", comenta sobre el delantero madrileño el profesor Callejo Muñoz. Y en eso Morata se ha mantenido firme.
Luis Enrique, el seleccionador, no quería estrellas en el equipo. Buscó siempre una familia. Y en los momentos duros se ha demostrado que ni él ha fallado a sus apuestas ni estos a él. "Unai es un ejemplo para todos los que empiecen a jugar al fútbol. No hay que pensar en los errores ni en los aciertos, sino en los intentos", comentó tras el encuentro ante Croacia.
"Luis Enrique es una persona que está rodeada siempre de profesionales de la psicología y de la gestión de grupo y emociones. Antes de elegir a tener líderes en el vestuario, ha optado por ser el líder del grupo y gestionar un cuadro unido, sin estrellas aparentes que puedan dar problemas por la suplencia. Tiene mucha convicción en lo que hace y va a muerte con sus ideas", señala sobre el técnico español Miguel Ángel Aroca, analista y entrenador.
"Salir en defensa de los jugadores al final también te fortalece de cara al vestuario. Quiere ser el líder, mantener la unión y que los jugadores crean en él. Por eso se vuelca en defensa de los futbolistas, como cuando dijo aquello de 'Morata y 10 más'. Sale respaldado. Cuando un jugador ve que el entrenador no da marcha atrás por circunstancias que suceden, van a implicarse con él. Para mí, lo más destacable de este equipo son las celebraciones en los goles, se ve una piña", añade sobre la gestión del conjunto español Miguel Ángel Aroca.
Luis Enrique apostó por un equipo joven e inexperto con ganas de competir. Muchos acusaban al equipo de no tener callo, de estar verde, pero puede que salgan de este torneo mucho más curtidos, visto lo ocurrido ante Croacia.
"A nivel mental, el potencial que tiene España se encuentra en que el grupo está en una posición de 'no tengo nada que perder y tengo mucho que ganar', algo que aporta valentía. Los jugadores de este equipo están muy ilusionados, muchos son primerizos. Después, otro factor importante es que se cuenta con Joaquín Valdés, el psicólogo de la selección, quien ha generado mucha cohesión de equipo. Al final, cuando hablas de un torneo como este no solo son las diferencias individuales, es el ser equipo. Se está viendo en un caso como Italia, por ejemplo", concluye al respecto el profesor Callejo Muñoz. España cuenta con un grupo unido y consciente de que en la vida siempre hay que levantarse, Suiza espera en la siguiente fase. Y sí, también sabe levantarse.