Después de las fechas navideñas, el 40% de los consumidores españoles acuden a plataformas de segunda mano para vender sus regalos en caso de que no les guste, según un estudio de Wallapop que evidencia el incremento de la demanda de este tipo de objetos también a la hora de regalar.

España destaca como un país de cazadores de chollos de segunda mano. Una tendencia de consumo que ha incrementado en los últimos años por varios factores, como el uso del comercio online a raíz de la pandemia.

El contexto económico actual también ha propiciado el aumento de la demanda de objetos reutilizados para regalar. "Muchas familias tienen dificultades para llegar a final de mes y hace que los consumidores estén muy sensibles al precio", explica Pol Fábrega, responsable de sostenibilidad de Wallapop.

Una situación en la que más de la mitad (60%) ya toman en consideración la sostenibilidad a la hora de tomar cualquier decisión de compra debido al impacto medioambiental que tiene el consumo.

"El 43% de consumidores ya considera comprar productos reutilizados ante cualquier decisión de compra. De hecho, seis de cada diez prevé comprar más productos reutilizados en vez de nuevos en los próximos tres años", reconoce Pol Fàbrega sobre el "cambio de paradigma".

En el caso de Wallapop, la compra venta de productos reutilizados en 2022 les ha permitido ahorrarse 2.375 millones de euros."Equivale al mismo dinero que se necesita para mantener nuestra red de trenes de alta velocidad durante 11 años", compara el responsable de sostenibilidad de la plataforma.

De hecho, la comunidad de usuarios tiene una percepción de ahorrarse un 44% del precio comprando en Wallapop en vez de un producto nuevo. "Ahorran unos 400 euros de media al año".

Estas operaciones también han contribuido a "evitar 510.000 toneladas de emisiones de dióxido de carbono" o "evitar el uso de 22.000 millones de litros de agua, el volumen de agua que consume Barcelona en un trimestre".

Este mercado reutilizable es una tónica habitual en Navidad, donde la plataforma destaca los regalos que más posibilidades tienen de acabar a la venta.

Es el caso de objetos de decoración, como por ejemplo marcos, jarrones o velas, y los pijamas y calcetines, un clásico en regalos navideños que pocas veces consigue acertar con el gusto del obsequiado. "Más del 80% de los consumidores españoles no tendría problema en recibir un regalo reutilizado", culmina Pol Fàbrega.

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