Al comprar un coche, hay muchos trámites que tenemos que hacer antes de poder disfrutarlo, pero también hay otros que tenemos que tener en cuenta aunque haga tiempo que tenemos el vehículo en nuestro poder. 

A través de la matrícula un coche queda registrado, se podría considerar como el documento de identidad del vehículo, con el que se puede determinar su antigüedad, identificar al propietario o inscribirlo en un proceso determinado. 

Cuando pagamos el impuesto de matriculación, el coche estará oficialmente matriculado y solo quedarán algunos detalles extra para que podamos disfrutar de nuestro vehículo. Este impuesto es una tasa que grava la primera matriculación de un coche en España, se paga una sola vez y es un pago que debemos realizar en la Agencia Tributaria.

Toda persona que compre un vehículo tendrá que informar de ello, así como de la dirección fiscal, que debe coincidir con nuestro lugar de empadronamiento, por eso cuando nos mudamos a otra ciudad o cambiamos nuestra dirección en el padrón, también tendremos que hacer lo propio y cambiar el domicilio fiscal de nuestro vehículo. 

Cambiar el domicilio fiscal del coche es algo que tendremos que hacer siempre que cambiemos nuestra dirección, por suerte existen varias opciones para poder realizar este trámite, haciendo que resulte más sencillo encontrar la manera que más cómoda sea para nosotros. Se podrá realizar este trámite presencialmente, por teléfono o a través de internet. 

Si quieres realizar la gestión online, tendrá que ser a través del registro electrónico de la DGT, para lo que se necesita tener un certificado digital válido, un DNI electrónico o ser usuario del sistema cl@ve pin o permanente. Quienes prefieran hacer los trámites vía telefónica podrán hacerlo al llamar al 060. 

También puede hacerse de manera presencial. En este caso, el primer paso es asegurarte de que el ayuntamiento de tu municipio cuente con un convenio para realizar de forma automática el cambio en las listas oficiales de la DGT. Si no es el caso, tendrás que acudir a la Oficina de Tráfico más cercana a tu domicilio. Sea cual sea la opción por la que tengas que optar, lo mejor es solicitar cita previa y llevar la documentación necesaria, evitando así tener que acudir varias veces. 

Es imprescindible presentar el DNI para poder realizar esta gestión, pero también solicitarán el permiso de circulación en regla y será necesario rellenar una solicitud para el cambio fiscal. Si la documentación no coincide con los datos de empadronamiento, será necesario presentar algún documento que certifique este cambio, como una factura o la tarjeta censal. 

Este trámite, que tantas opciones nos propone para poder llevarlo a cabe, tiene que ser realizado en los 15 días siguientes al cambio de domicilio fiscal. 

Cumplir con las normas establecidas es esencial para evitar tener problemas de cualquier tipo, tener el domicilio fiscal del vehículo actualizado es fundamental a la hora de pagar los impuestos correspondientes. Además, al realizar este trámite, si contamos con un permiso de circulación antiguo con el viejo domicilio fiscal, el cambio será gratuito.