La truculenta historia familiar de Vicky Martín Berrocal que nunca antes había contado: su padre tenía una doble vida
La madre de Vicky Martín Berrocal se enteró, después de quedarse embarazada, de que su pareja tenía mujer e hija en Madrid
Vicky Martín Berrocal ha logrado hacerse un hueco en el corazón de muchas personas por su generosidad y su simpatía, pero ha sido aquí, en 'Mi casa es la tuya' junto a Bertín Osborne, donde esta onubense de corazón, aunque nacida de rebote en Sevilla, ha contado todo aquello que aún desconocíamos de la diseñadora.
Empresaria de éxito, Vicky desde muy pequeña peleó por todo lo que deseaba apoyada siempre por el coraje de su madre, Victoria, una guapa mujer morena que soportó con gran dignidad en plenos años 60 una situación familiar algo atípica.
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Vicky le ha contado a Bertín, y por primera vez en público, que su padre tuvo dos mujeres, que al comenzar la relación con su madre (cuando ella tenía solo 16 años y él 30) ya estaba con otra mujer en Madrid con la que compartía una hija. Sin embargo, José Luis Martín Berrocal siguió adelante con aquel amor, un amor que sintió al instante cuando vio pasar a aquella morena por una calle de Huelva:
"Mi padre se enamoró de mi madre, y ella de él, hasta las trancas (...) Mi madre aceptó aquello, aceptó a mi padre como era, no intentó cambiarlo, él tenía dos mujeres y dos familias, una en Madrid y otra en Huelva".
Tres hermanos en Madrid por parte de padre
Vicky ha relatado con melancolía que, lejos de suponer algo triste para ellas, cuando su padre llegaba a Huelva era todo alegría: "Me llevaba a 'Galerías Preciados' y me compraba de todo". Con los años, Vicky descubrió que, a parte de su hermana pequeña, también contaba con tres hermanos en Madrid, fruto de aquella otra relación de su padre, y a quienes conoció en su pedida de mano, semanas antes de su boda con el torero Manuel Díaz: "El día de mi pedida mi padre trajo a mis hermanos, aunque yo ya me había encontrado con uno de ellos en una piscina de Punta Umbría donde veraneábamos, me di cuenta de que aquel niño tenía la misma cara que yo".
Con los años, José Luis decidió que su lugar estaba en Huelva, junto a Victoria y sus hijas, y allí estuvo hasta el día en el que falleció hace ya diez años, "sintiéndose orgulloso de su hija" y de lo lejos que había llegado en su carrera como diseñadora de moda: "Mi padre ha sido el hombre de mi vida".