Lolita le confiesa a Bertín los peajes de su vida por ser una Flores: "Perdí mi libertad"
telecinco.es
01/12/201800:32 h.Lolita vuelve a la iglesia en la que se casó: "Es la primera vez que subo a este altar, aquel día no pude, era un infierno"
Este sería el primer peaje que tuvo que pagar Lolita. El hecho de ser la hija mayor de la gran artista Lola Flores supuso que el día de su boda muchos quisieran acercarse para ser testigos del evento. Algo que enturbió ese gran día. Mítico es el momento en el que Lola gritaba a los asistentes "si me queréis, irse". La cantante vuelve junto a Bertín a la Iglesia y recuerda aquel día: "Tuve que casarme en la sacristía, no pude llegar al altar de la cantidad de gente que había".
Lolita recuerda el multitudinario entierro de Lola Flores: "No pude estar ni cinco minutos a solas con ella"
Otro gran peaje lo pagó el día que murió su madre. El entierro fue multitudinario y eso supuso que Lolita no pudiera estar con su madre ni cinco minutos a solas, tal y como le revela a Bertín. No es este el único momento en el que Lolita ha hablado de su madre, pues recuerda que siempre que se iba de casa por causas de trabajo le dejaba un sobre cerrado con una carta en su interior a su hija en el que le contaba qué tenía quehacer si le pasaba algo: "Nunca llegué a leer esa carta".
Lolita se emociona: "Por ser Lolita Flores tuve que renunciar a ser libre"
Y es que la vida de Lolita no ha sido nada fácil. Recuerda emocionada su juventud. Sabe que pertenece a una de las familias más queridas de nuestro país y eso es algo que no sale gratis: "Por ser Lolita Flores tuve que renunciar a ser libre, tienes que medir dónde vas, qué dices, quién eres, y yo soy gitana, me gusta la libertad". Asegura, además, que por ser de la familia Flores no tuvo la libertad que habría deseado: "Yo ahora me quedaría en pelotas y me metería en el agua, pero no puedo por quién soy".
Los peores momentos de Lolita: tuvo que pedir dinero a su hermana para comer y perdió la casa familiar de Marbella
La fama tiene sus subidas y sus bajadas y no siempre los artistas gozan de una buena solvencia económica. Lolita lo reconoce: “He tenido que pedir dinero para comer, para vivir y para pagar la hipoteca a mi hermana. Ahora no me puedo quejar, estoy al día con Hacienda, tengo trabajo y vivo de alquiler”. Solo hay una cosa que se le resiste... el amor. Además, Lolita le confiesa a Bertín la mayor pena de su vida: la pérdida de la casa familiar de Marbella. Resulta que Lola Flores pidió un crédito al banco y puso como aval la casa. El banco fue absorbido por otro banco y luego no se quiso cobrar la ínfima parte del crédito que había pedido Lola, sino el crédito en su totalidad más intereses. Y adiós casa.
Otros momentazos de la entrevista: