En las últimas elecciones generales, el expresidente de Ciudadanos se llevó un gran varapalo logrando únicamente 10 escaños en el Congreso de los Diputados. Albert Rivera le ha confesado a Bertín Osborne que él ya sabía que el resultado no iba a ser bueno y que su salida de la política iba a ser algo inminente.
Pese a que en las elecciones anteriores, durante el mes de abril, el resultado de su partido fue realmente espectacular, 57 escaños, Albert ha reconocido que ya ahí se dio cuenta de que "se estaba acercando a su punto máximo en el mundo de la política".
Rivera le comentó a sus allegados, entre ellos a su pareja Malú, que sentía que ya había llegado el límite de su vida como político: "Si no llegaba a ser presidente del Gobierno no tenía sentido para mí seguir, en la vida yo no sé hacer nada sin ilusión".
Albert llevaba meses dándole vueltas a la idea de dejar la política y se lo comentó únicamente a dos personas: a José Manuel Villegas, diputado en el Congreso por Ciudadanos, y a su pareja Malú. Según ha contado el propio Rivera, Malú comprendió a la perfección que tomase aquella decisión:
"Me apoyó, me entendió y al final ella es una persona que es super exigente consigo misma y que viene al igual que yo del éxito y de picar piedra y que sabe lo que es currar y lo entendió perfectamente".