Elsa ha tomado una decisión muy importante: no quiere estar con Andy. Cree que se están haciendo daño el uno al otro. Además, la última vez que se vieron, el hijo de Luisa la agredió: la agarró del cuello porque pensó que su novia estaba siendo muy egoísta al querer recuperarse e irse del hospital sin él.
Andy quiere llamar la atención de alguna forma, sobre todo de su chica, y la única manera que tiene de hacerlo es… Ingerir un montón de pastillas. Lo que pasa es que no han sido suficientes. Olivia piensa que lo ha hecho conscientemente, es decir, no ha querido del todo suicidarse, solo avisar de que lo puede volver a hacer.
La hija de Marian cree que ha sido su culpa y ha pedido verle. Necesita tener una segunda conversación con él: sabe que no pueden seguir así, se están haciendo daño. Además ella tiene muy claro que no quiere volver con él.