Entusiasmo por parte del público en la bienvenida a esta segunda edición pero también confesiones inéditas entre los profesionales que lo hacen posible. Jesús Vázquez ha dejado claro que este es un programa que llega y que marca. “He visto caerse lágrimas a técnicos como torres, hombres que se quedaban parados y no podían seguir trabajando. Momentos que yo no había vivido nunca en la televisión”, ha dicho quien, tras décadas entregadas a la televisión, asegura que “La Voz es el mejor regalo que me podía dar la vida”.
Y tiene razón. Porque el aplauso atronador de los periodistas al visionar en exclusiva una de las actuaciones tampoco es habitual. Todos han podido ver cantar a Ainhoa, una de las artista que participa en la segunda edición. Y les ha gustado. Y les ha emocionado: imposible no aplaudir. “Es un programón, es un programón”. Este ha sido el murmullo que hemos podido escuchar en la sala de prensa. “Esta edición parece mejor que la anterior”, comentaban periodistas de distintos medios audiovisuales. Desde telecinco.es confirmamos que Jesús Vázquez tiene razón: La Voz. Si él nunca había visto llorar a los técnicos, nosotros nunca habíamos visto a los periodistas tan emocionados en la presentación de un programa de entretenimiento.
“Ser justos”, el gran reto de La Voz
Por su parte, los coaches están de acuerdo en que La Voz es no sólo una oportunidad sino también un desafío para ellos. Se sufre, y mucho, si te toca ser coach. Convertirse en la vara de medir del talento de más de un centenar de aspirantes es algo que les hace dudar y sufrir tanto o más que a los propios participantes. En esta edición ciento treinta y seis talens fueron seleccionados de entre los más de quince mil aspirantes y, tras las audiciones ciegas, los coaches seleccionarán a los sesenta y cuatro afortunados que competirán en las batallas.
“Sufrimos mucho por la gente que se nos ha podido escapar y seguro que hemos metido la pata”, ha dicho Rosario. Y comparte su temor con sus compañeros. Todos desean que los treinta y seis seleccionados sean de verdad los mejores y, de alguna manera, no se perdonarían que fuera de otro modo, pero sólo tienen un minuto y medio para decidir quien continuará y quien no. “Sin duda lo más difícil de todo es ser justo”, añadía Orozco. “Porque el concurso es muy complicado y exige mucho. Ojalá que ustedes disfruten la mitad de lo que yo he disfrutado haciéndolo”.
En este sentido, David Bisbal se siente especialmente identificado con los artistas. “Cuando escucho sus pasos acercándose siento los nervios que se sienten en ese escenario tan difícil, donde en un minuto y medio lo tienes que dar todo”. No puede evitar acordarse de cuando era él quien se asomaba asustado a un escenario en televisión. “Estoy ahora tratando de dar consejos a jóvenes y recuerdo que hace prácticamente doce años yo estaba en el mismo lugar que están ahora los chicos, conseguir una oportunidad discográfica”, ha dicho.
Nuevas reglas, nuevas fases y nuevo día de emisión
Además, quien crea que ya se lo sabe todo sobre La Voz, se equivoca. La serie es distinta a la primera. Habrá quince episodios, seis pertenecen a las audiciones a ciegas, cinco batallas y cuatro programas en directo. El programa es muy sorprendente en muchas cosas, pero sin duda la gran novedad está en la parte de las batallas. En La Voz 2013 se inaugurarán los robos, donde los coaches tendrán la opción de robar a una de las personas que uno de sus compañeros haya descartado para su equipo. Según David Bisbal, “los robos son una buena novedad, porque dentro del sufrimiento que te genera despedir a alguien de tu equipo, pues que siga en otro te puede traer una chispa de alegría”. Sin embargo, Jesús Vázquez ha dado una vuelta de tuerca a sus palabras: “Gracias a los robos vamos a exprimir aún más el corazón de los coaches y creo que van a vivir momentos de verdadera tensión”.
Además, La Voz cambia día de emisión. Si en la primera edición lo vimos los miércoles, esta nueva etapa arranca en lunes. Manuel Villanueva, director general de contenidos de Mediaset, ha explicado los motivos de este cambio: “Hemos cambiado de día porque el lunes es el día de mayor consumo y por tanto nuestra apuesta más sólida debía ir en este día”, ha dicho. Y ha añadido: “La verdad es que estamos muy seguros del producto y ese era el día”. Respecto a las metas de la cadena para esta nueva etapa, Villanueva ha sido contundente: “Cuando un programa hace el treinta de audiencia, nosotros nos preguntamos qué estaba haciendo el otro setenta”.