Mayte ha sido convocada al juzgado para responder por sus fraudes. Para evitar que ingrese en prisión, Rebeca le ha dado una idea: hacerse pasar por loca. Se ha convertido en la sombra de Violeta para poder imitarla y, al ir con ella a un restaurante a comer, a la pequeña Recio se le ha ido la olla, le ha quemado el pelo a una mujer y casi acuchilla a uno de los comensales.