Parece que nada ni nadie ha podido frenarles. Desde que Manuel llegó a Villa Playa, Andrea se olvidó por completo de su novio Roberto y de Óscar, el soltero con el que hasta ese momento había tenido más 'feeling'. Los participantes se habían conocido tan solo una semana antes de 'La última tentación' y entre ellos ya había surgido una química especial que les ha llevado a caer de lleno en la tentación no solo una sino dos veces.
Lo cierto es que sus compañeros de Villa Playa lo venían advirtiendo. Ellos tampoco se han cortado a la hora de besarse, acariciarse y tocarse, siendo el jacuzzi su sitio preferido de la villa.
"Con Andrea lo que siento es atracción sexual. Ha habido mamoneo, ha habido toqueteo, cosas... Yo tampoco quiero forzar la situación", decía Manuel, que desde entonces ha compartido todas las noches su cama con ella.
Pero la última fiesta traía consigo unas ganas irrefrenables. Andrea y Manuel volvían a compartir habitación. Ella le pidió una de sus camisetas para dormir. "Esta noche no hay camisetas", bromeó el gaditano. "Andrea, la que me has liado. Yo venia aquí a pasármelo bien, a pelearme con Lucía... No venía a liarme con nadie. ¡Qué grande la Andreíta!", añadió. "Y yo venía a poner mi relación a prueba... otra vez", señalaba ella, que ya participó en 'La isla de las tentaciones 1'.
Al final sucedió lo que ambos venían esperando desde hacía tiempo: una noche de pasión.
Con su tórrido encuentro, saltaba 'La luz de la tentación', que esta vez se activa en la villa si alguno sobrepasa los límites impuestos por sus parejas. Al sonar la alarma, Andrea caía rápido: "Eso tiene que ver con esto, seguro".
Mientras, sus compañeros empezaron a tener teorías sobre lo que estaba pasando. "¿Dónde está Manuel?", señaló Marta Peñate. "A lo mejor están 'carricocheando", apuntó Óscar, que no le ha sentado nada bien el acercamiento de Andrea y Manuel.
Marta y Lucía no perdieron tiempo y subieron rápidamente a la habitación de Manuel para averiguar si estaban teniendo sexo. Tras sonoros golpes en la puerta, el de Puerto Real les decía que no podían entrar, con lo que obtuvieron la respuesta que buscaban.
"Hay un límite. Ahora mismo están penetrando o penetrandoculminando el amor", anunció Marta a sus compañeros. En un aparte, Lucía y Alejandro, que saben de qué límites se trata al haber formado parte de ello, caían entonces en el funcionamiento de 'La luz de la tentación', que esta vez no suena porque hayan hecho algo en la otra villa.
Ya lo había advertido Manuel cuando sus compañeras tocaron a la puerta: "A mí nadie me va a cortar el rollo". El gaditano no solo siguió con su apasionado encuentro sino que a la mañana siguiente Andrea y Manuel decidieron tener un segundo asalto.
"Con Manu el primero me ha gustado y me apetecía repetir y él es muy fogoso. No me arrepiento porque siempre hago lo que me apetece y con Manu estoy encantada", ha reconocido Andrea.
"¿Habéis hecho el amor?", se interesaron Julián y Gonzalo al verles en el desayuno. Cuando lo confirmaron, lo celebraron como si de un gol se tratase. "¿Es verdad que Manuel dura 30 segundos?", preguntó Gonzalo sobre su amigo. Cuando Andrea le dijo que no, él aprovechó para mandar un 'recadito' a Fiama, que lo había dejado caer.
Roberto aún no sabe que Andrea ha sido infiel por completo. Pero en su primera hoguera ya había advertido lo que podría pasar. Para el participante, que lleva ocho meses con su novia, fue muy duro ver la conexión entre Manuel y Andrea y además enterarse en 'La última tentación' de que ya habían tenido algo antes del reality.