Esta semana Mónica Pont se convertía en noticia tras sufrir junto a su hijo un espeluznante atraco en la entrada de su vivienda en Ciudad de Méjico. La actriz volvía de vacaciones en compañía de su hijo, regresaban de unos fabulosos días en Tulum cuando se vieron sorprendidos por un atracador que llegó incluso a apuntarles con un arma antes de robarles.
Mónica Pont ha conectado en directo con 'La última noche' desde Miami, lugar en el que se encuentra recuperándose del susto vivido y desde donde ha relatado con todo lujo de detalles lo ocurrido:
"Mi hijo y yo volvíamos de Tulum y al llegar a Ciudad de Méjico cometimos el error de no quitarnos los relojes y guardarlos, en el propio aeropuerto hay bandas de ojeadores que te observan y saben si lo que llevas encima es bueno o no y también si has cambiado dinero".
Mónica ha explicado que ya en el coche que les llevaba a casa notó algo extraño cuando el conductor comenzó a mandar mensajes y se pasó la entrada de su casa. En el momento en el que Mónica y su hijo se bajaron del coche comenzó la pesadilla:
"Acabábamos de coger las maletas del coche y estábamos entrando en el portal de la urbanización cuando un hombre vestido de negro con la cara descubierta nos apuntó con un arma, Manuel, nuestro portero, en un acto de heroísmo se enfrentó a él y recibió dos disparos, en ese momento me di cuenta de que iba en serio, hasta ese momento todo me parecía como una película, como si no fuese real".
A Mónica se le entrecortaba la voz recordando el momento en el que el atracador apuntó con el arma directamente al abdomen de su hijo diciéndoles que o le daban sus relojes o los mataba allí mismo:
"Comprendí que iba en serio, no le había importado disparar a Manuel, esa gente sin valores no tiene miedo y no le importa acabar con la vida de varias personas".
La actriz española decidió entregarle los relojes al atracador y poner así fin a la pesadilla, no sin antes intentar ayudar a Manuel:
"Yo quería quedarme a ayudar a Manuel pero mi hijo me convenció para que subiéramos a casa y llamáramos a emergencias, para que nos pusiéramos a salvo, allí no podíamos hacer nada por Manuel, cuando volvimos a bajar ya estaba allí la policía (...) Estoy en contacto con la familia de Manuel y ya ha salido del coma, le han tenido que operar tres veces".