Eduardo Bolinches, analista financiero, comparece en el directo de ‘La mirada crítica’ para explicar si es viable reducir la jornada laboral para los distintos sectores del mercado en España.
“Esto va a ser un desastre para el empresario y bueno para el Estado, la empresa que pueda va a contratar más para suplir la ausencia de trabajador por reducción de horas, pero no nos olvidemos que España es un país de pymes", detalla el analista.
"El 73% de las pymes es sector servicio y generan el 66% del empleo. Con un restaurante en Benicasim no podría abrir todas las noches porque me haría falta personal. La cruda realidad es la del empresario pequeño, la del autónomo, te enteras a mitad de año y habrás cubierto el cupo, son parches que no van a ningún sitio", asegura Bolinches.
Por último, Eduardo Bolinches explica que "las grandes empresas podrán hacerlo, ajustaran horarios, jugarán con la movilidad de los empleados, pero la carpintería, la hostelería y muchos sectores…lo tiene muy crudo. Solo hay que mirar fuera, Portugal tiene 40 horas, Francia 35 horas, somos o vamos a ser el segundo país de Europa con el periodo de horas más bajo. Todo el mundo está en 40 horas, por no decir Alemania que ni tienen límite.
La reducción de la jornada anual es "inminente" a pesar de la oposición de las organizaciones empresariales que denuncian la imposición del ministerio de Trabajo alineado con los sindicatos. El Gobierno quiere que el Congreso apruebe en breve reducir la norma lo que posibilitaría un máximo de 38,5 horas semanales este año y las 37,5 horas en 2025. Una rebaja que según Cepyme supondría un coste directo de más de 10.000 millones de euros que ascendería hasta los 42.400 millones de euros si tenemos en cuenta las pérdidas productivas. La medida no afectaría por igual a todos los sectores productivos, con especial incidencia en hostelería, comercio, inmobiliarias y agroagricultura.
Los empresarios han puesto el grito en el cielo por la falta de diálogo con el Gobierno y han sacado a la luz sus cuentas de cómo les afectará por sectores. Según, estas fuentes, el sector más perjudicado sería el de los servicios inmobiliarios (99,8 %) donde se agrupan los trabajadores cuyas jornadas superan las 37,5 horas semanales. Le sigue muy de cerca la hostelería (99,5%) y la agroganadería (96,8%).
En cuarto lugar están los trabajadores del sector comercio en el que un 96,6 de sus trabajadores están sujetos por convenios colectivos con jornadas semanales superiores a las 37,5 horas.
En el lado contrario, solo el 4,6 % de los trabajadores de la Administración verían su jornada laboral reducidad, según se desprende del informe 'Impacto de la reducción de la jornada laboral' elaborado por Cepyme.
Entre las ramas de actividad con jornadas de 39,5 horas o más y que resultarían más afectadas por llevar el tiempo de trabajo a 37,5 horas semanales, están información y comunicaciones, con un 21,1 %, lo que equivale a 10.900 personas; transporte y almacenamiento (19 % o 87.900 personas); comercio (17,5% o 351.900 afectados) y hostelería (15,1% o 208.100 personas).
Por otro lado, la patronal de la pequeña y media empresa recuerda que la jornada laboral ha experimentado una tendencia a la baja en los últimos 20 años gracias a la laboral realizada por sindicatos y patronal en las distintas mesas de negociación, pasando de las 40,4 horas por semana en 1983 a las 38,3 horas en 2023.
En el caso de los convenios de ámbito de empresa, la reducción ha sido más marcada, bajando de 40 horas a la semana en 1983 hasta 37,2 horas en 2003, que fue la misma que en 2023.
Por ello, desde Cepyme han insistido en dejar a los agentes sociales trabajar en las mesas de negociación y tener en cuenta la productividad y rentabilidad a la hora de reducir el tiempo de trabajo.
Así, recuerda que en el primer trimestre del año la productividad de las pymes ha caído en tasa interanual por quinto trimestre consecutivo, hasta situarse por debajo del 3,3% respecto al mismo trimestre del año previo, por lo que avisa de que las pequeñas y medianas empresas serían las más afectadas por esta disminución del tiempo de trabajo.