Íñigo Errejón comparece durante el directo de 'La mirada crítica' para comentar los puntos más importantes de la subida del SMI y la reducción de la jornada laboral. Además, el diputado de Sumar escucha las declaraciones de un camarero y responde ante toda la audiencia.
Ana Terradillos, aprovechando la presencia de Errejón, explica la situación actual y da paso al propietario de un bar de Madrid: "Después de la subida del salario mínimo interprofesional, el gobierno pone la mirada en la reducción de la jornada laboral, que lo explicaba muy Yolanda Díaz: de 40 horas a 38,5 durante este año y el siguiente a 37,5. La patronal ya ha dicho que no está de acuerdo...".
La reportera del programa se desplaza hasta el bar de Benjamín, un camarero que lleva 22 años detrás de la barra de su negocio. El trabajador tiene 10 empleados contratados y explica qué le parece la medida de reducción de jornada: "Para mí va a ser bastante complicado porque el pequeño comercio, y sobre todo la hostelería, que tenemos muchísimas horas el local abierto, pues todas las horas no son productivas, aunque hay que estar en ella...".
"Solamente se produce cuando el cliente entra, pero cuando el cliente no entra debes estar y eso no es producción de empresa", comenta Benjamín a la reportera. Tras esto, el camarero compara dos situaciones laborales: "En una oficina se pueden producir las 7,5 horas de trabajo porque supuestamente el empleado ya tiene el trabajo preparado, lo planifica para producir en esas horas autorizadas por la ley. En hostelería es imposible que se pueda producir en esas horas concretas".
Además, el dueño de un modesto bar explica que los precios no paran de subir y que eso perjudica a su negocio: "Cada vez es peor, hay más impuestos, menos ingresos, cada vez viene menos gente a la hostelería, los gastos de los alquileres están por las nubes, la luz ha subido muchisimo, el gas, los seguros sociales...".
Íñigo Errejón, que apoya de forma incondicional la reducción de jornada, contesta al dueño del bar: "Es posible que los trabajadores de ese establecimiento piensen diferente, que agradecieran salir media hora antes para cuidar a los hijos, formarse, descansar, hacer deporte o le de tiempo en hacer la compra".
"En nuestro país hay dos formas de ver la generación de prosperidad. En la primera, es la que unos creen que sólo se puede hacer cargándola sobre la espalda de los trabajadores, más horas con menos salarios y nosotros creemos que esto es un modelo de economías subdesarrollada", explica Íñigo Errejón.
El de Sumar continúa desarrollando su respuesta: "La manera de generar prosperidad es la de tener trabajadores en mejores condiciones, más formados, que tienen vinculación con la empresa y forzar que haya una modernización del modelo productivo, que no descanse sobre el cansancio y la salud física y mental de los trabajadores".
"Cuando se piensa en la subida del salario mínimo, la gente dice '¿ese dinero de dónde va a salir?'. La pregunta que hay que hacerse es '¿a dónde va ese dinero?", detalla Errejón ante la audiencia. Tras esto, el de Sumar explica: "Es muy sencillo, ese dinero va a los más de dos millones de trabajadores en España que tienen el salario mínimo y que lo destinan a una reparación del coche que no se podía hacer, a poder ir a la peluquería con más frecuencia, a diversificar la cesta de la compra, a pagar cosas que había pendientes... vuelve a la economía, estimula el consumo, estimula la demanda y estimula los pequeños negocios: esa es nuestra receta".