Melyssa se quitó los zapatos y salió corriendo de su hoguera tras ver a su novio besar a una de las solteras en la nariz, gesto que ella le respondió con un lametón en el cuello… Era un juego pero a su novia no se lo pareció ya que se fue entre gritos de la hoguera.
Pasada la noche, confesaba ante las cámaras que no había podido dormir: “Cada vez que cerraba los ojos, lo veía con ellas”. Las imágenes no dejaban de asaltarla y se sentía “en bucle”: “Siento angustia todo el rato dentro de mí”.
Melyssa decía que se ha sentido muy arropada por todos los compañeros, pero a ellos mismos confesaba: “He estado vigilando las cámaras y he estado a punto de correr”.