Hace poco descubrimos qué tenían en común la conocidísima Georgina Rodríguez y ‘La isla de las tentaciones’: la respuesta era Javi, uno de los solteros, que en el pasado tuvo relación con la novia de Cristiano Ronaldo. El tentador ha dado una entrevista a la revista Semana en la que ha contado anécdotas de su pasado con Georgina y la imagen que de ella tenían en Jaca.

Georgina y Javi fueron amigos cuando eran adolescentes. “Pasamos mucho tiempo junto entre los 13 y los 18 años”, explica. Eran compañeros de instituto y muchas veces compartían confidencias, aunque parece que nunca llegaron a tener más que una amistad. Eso sí, Javi cuenta en la revista que la novia de Cristiano “era una de las chicas más guapas del instituto”. También “muy selectiva” con los chicos que la gustaban.

Los dos fueron muy amigos hasta que se marcharon de Jaca. A partir de ese momento el contacto entre ellos ha sido mínimo. “No la he vuelto a ver”, cuenta Javi en la revista.

Pero los recuerdos siguen ahí y fueron muchos los momentos que compartieron. Uno de los más especiales ocurrió después de un día normal en el instituto: “Cuando salíamos de clase, ella y yo íbamos a un parque que estaba al lado y recuerdo que los dos soñábamos despiertos hablando de viajar, de recorrer el mundo… Los dos teníamos muy claro que nos íbamos a comer el mundo. Y ahora que han pasado los años y veo que se ha convertido en una mujer con una familia increíble que ha cumplido lo que se ha propuesto y yo, que no me puedo quejar porque he cumplido muchos sueños, me hace gracia recordar lo que hablábamos. Quién nos lo iba a decir cuando estábamos en ese parque de Jaca…”.

Javi y Georgina perdieron la relación cuando ella se marchó de Jaca para irse a Madrid, donde intentaría probar suerte como bailarina profesional. Desde ese momento, los dos apenas han hablado y Javi reconoce que tiene más contacto con Ivana, la hermana de la novia de CR7.

Si Georgina se marchó para intentar cumplir su sueño, Javi no fue menos. Primero se fue a Zaragoza a estudiar Veterinaria y, durante el último curso, obtuvo una beca para irse a Argentina. Allí no solo acabó la carrera, sino que también descubrió su pasión: la fotografía. Actualmente se dedica a ella de forma profesional, lo que le ha permitido recorrer el mundo. ‘La isla de las tentaciones’ le ha venido muy bien para dar aún más impulso a su carrera. “Ha sido toda una experiencia, me ha favorecido mucho profesionalmente. No paro de trabajar”, ha contado.