{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
David Vaquero ha mirado cara a cara a la tentación de su novia, María Aguilar. Es decir, el participante ha podido tener un encuentro con Álvaro Boix, ex de 'La isla de las tentaciones' que ha regresado al paraíso como soltero y con una historia abierta con María.
Por primera vez en Villa Playa, la voz de Sandra Barneda sonaba a través de un altavoz para indicar a Álvaro que abandonase la villa. Él estaba con las solteras y con sus compañeros metido en el jacuzzi, así que las caras de todos fueron un poema ante el momento.
Momentos más tarde, David se encontraba con Sandra Barneda en plena naturaleza paradisíaca. "Bienvenido a tu cara a cara contra la tentación", le decía la presentadora. Después, Álvaro Boix aparecía en escena con su collar del veto, el cual lanzó a David pidiéndole explicaciones por haberle vetado en Villa Montaña durante 24 horas.
"Yo no te quería vetar. Han sido mis compañeros. Yo te quería dejar ahí con ella porque ya puedes estar ahí dos meses que no vas a conseguir nada", le explicó David a Álvaro. Sin embargo, el soltero creía que en el fondo tenía miedo de lo que pudiera pasar entre él y María.
David y Álvaro podían hablar durante 10 minutos y gran parte del tiempo se lo dedicaron a reprocharse cosas y a retarse. "Yo conozco más a María que tú", decía Álvaro. "Una vez que María está conmigo, de ti ya se olvida", respondía David. Pero Álvaro hacía hincapié en que él y María "han vivido mucho" y que antes que a David, ella le quiso a el.
De hecho, María había medido mucho las distancias con Álvaro pero con el paso de los días en la villa el cariño ha hecho que los dos tengan un acercamiento. De ahí que Álvaro asegure que "María tiene miedo a cómo se comporte David".
La tensión entre David y Álvaro fue en aumento y los dos acababan discutiendo sobre quién se quedará o no con María tras 'La isla de las tentaciones'. "Suerte, que la vas a necesitar", se decían mutuamente al despedirse.
Tras el encuentro, David y Álvaro volvían a sus respectivas villas y comentaban lo sucedido. En el caso de David, entraba en la villa con una gran sonrisa y asegurando que está muy tranquilo porque no cree que vaya a pasar nada entre Álvaro y María. Pero se quedó muy pensativo con lo de que María tendría miedo de que él le fuese infiel. "Me ha rayado porque imagino que será que tiene miedo a perderme y no me gustaría que estuviera allí pasándolo mal", explicó David.
En el caso de Álvaro, cuando regresó a Villa Montaña contó qué había vivido en sus veinticuatro horas fuera de la villa. "El comportamiento de David ha sido un poco de niño pequeño porque no ha parado de repetir insultos. Me decía 'pelele'. Yo me he defendido", contaba el soltero.
Por su parte, María terminó muy decepcionada al saber del momento: "Ha sido una pelea de gallos. David ha desaprovechado la oportunidad de saber cómo estoy", sentenciaba.