Todo parecía apuntar a que la relación de Laura con su soltero favorito, Adrián, iba a sufrir un punto y aparte. Después de haber caído en la tentación con él, la entrada de Álvaro Boix como nuevo tentador VIP lo cambiaba todo.
Laura confesaba haber tenido un desliz con él durante su relación con Mario, algo que descuadró lo esquemas a Adri: “Creía que tenía otros principios”. Más tarde se disculpaba y ella le concedía su siguiente cita.
De hechos, sus compañeras se preocupaban de si después de esa escena, ella seguía sintiéndose bien a su lado: “¿Sigues a gusto con Adri o te estás agobiando?”, le preguntaba Sara. Ella se reafirmaba en sus sentimientos por él: “Me gustaría que mi pareja fuera así”.
No obstante, la química entre ellos ha sido más fuerte que su primer rifirrafe. Alcanzada la noche, Laura y Adri se metían juntos en el jacuzzi y daban rienda suelta a la pasión. Él no paraba de buscarla besándole el cuello y ella, aunque le pedía que dejara de mirarle la boca, no ha podido resistirse.
“Lo que siento es que tengo unas ganas increíbles. Y cada día más”, le decía él tras haber salido del jacuzzi por el frío y estar arropados con las toallas. Laura y Adri se besaban de nuevo zanjando así todas las dudas.