Todo listo en Barcelona para que el clásico se juegue con normalidad
3.000 efectivos velan por la seguridad dentro y fuera del campo
Los aficionados deben acudir al estadio con tiempo
Tsunami ha convocado a la gente a las 16h
El Camp Nou está blindado ya para un clásico que se celebra en cuestión de horas. Barça y Real Madrid se enfrentan esta tarde, a las ocho, en Barcelona. Todo el dispositivo de seguridad está preparado. Unos 3.000 efectivos se encargan de vigilar un partido amenazado por Tsunami Democratic. Las expediciones de ambos equipos ya están en el Hotel Sofía de la capital catalana, a escasos metros del Camp Nou, y sin incidencia alguna por el blindaje de los Mossos d'Esquadra en la zona.
La expedición del Real Madrid, que aterrizó en el aeropuerto antes de las 12.00 horas y con Florentino Pérez a la cabeza, llegó en dos autobuses sin ningún distintivo del club y escoltados por la policía catalana al hotel, cuyas calles adyacentes están cortadas al tráfico, unos veinte minutos más tarde.
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El conjunto blaugrana salió en su autocar desde el Camp Nou poco después de la llegada del Real Madrid al hotel, y también está ya concentrado en el mismo escenario. Los jugadores de Ernesto Valverde llegaron al Camp Nou en sus propios vehículos, desde las 11.00 horas, y salieron todos juntos en el autocar para llegar pasadas las 12.30 al Sofía.
Se espera que ambos equipos salgan en sus autocares hacia las 18.00 horas, dos horas antes del inicio del partido, en dirección al estadio y bien escoltados por la policía catalana. Los dos equipos saldrán del mismo hotel, pero no a la vez.
Severos controles que retrasarán el acceso
La plataforma independentista ha convocado a sus seguidores en los cuatro puntos críticos que rodean el estadio, en las vías de acceso al recinto. Aún así, desde el Barça lanzan un mensaje de tranquilidad y piden a sus seguidores que no se queden en casa.
Un dispositivo sin precedente vigilará las inmediaciones del estadio. Habrá más 3.000 efectivos. Mil de ellos desplegados desde por la mañana. 1.000 son Mossos, 400 policías nacionales y el resto agentes de seguridad privada contratados por el Barcelona.
El objetivo del dispositivo es que los aficionados lleguen al Camp Nou, que se pueda celebrar el partido y que se desarrolle bien, y que los manifestantes convocados por Tsunami Democràtic que quieran concentrarse "lo puedan hacer con seguridad", según el Govern. Se recomienda a los aficionados que acudan con tiempo al estadio porque los severos controles de seguridad retrasaran el acceso.
Los Mossos impedirán que los manifestantes de Tsunami se acerquen a las puertas del estadio, que puedan bloquear los accesos y asegurarán que permanezcan en los cuatro puntos que han anunciado: la calle Arístides Maillol con avenida Joan XXIII, la avenida Joan XXII con la calle Menéndez y Pelayo, la Travessera de les Corts con Arístides Maillol, y la Travessera de les Corts con Elisabeth Eidenbenz.
El peor escenario: que tomen el césped
Para la policía catalana el peor escenario sería una interrupción del partido pero tienen en cuenta que Tsunami ha trasladado que no tiene intención de "bloquear o suspender" el encuentro, una acción que comportaría multas importantes y medidas disciplinarias a los socios.
El dispositivo se ha diseñado teniendo en cuenta que es un partido de 'alto riesgo'.
La plataforma Tsunami Democràtic ha convocado la "concentración masiva" a partir de las 16 horas. Además, pretende hacer visible en las gradas del el lema 'Spain Sit and talk'.