El detenido por tirar desde la muralla de Lugo a una joven fue investigado por abuso sexual a una niña de 12 años
Fue investigado en el año 2014 cuando tenía 17 años por un delito de abuso sexual a una niña de 12 años
Relación con un supuesto pacto matrimonial entre personas de nacionalidad rumana
Arreglo matrimonial pactado entre el joven y la familia de la niña por 2.500 euros
El hombre acusado de haber tirado desde lo alto de la muralla de Lugo a una joven y luego la dejó herida el suelo el pasado miércoles, ya fue investigado en el año 2014 cuando tenía 17 años por un delito de abuso sexual a una niña de 12 años.
El caso por el que fue investigado tenía relación con un supuesto pacto matrimonial entre personas de nacionalidad rumana.
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La policía local del Lugo rescató a la menor de la vivienda que compartía con el detenido y el joven fue acusado inicialmente por un delito de abusos sexuales puesto que la fiscalía consideraba que las relaciones mantenidas no habían sido consentidas por la niña, según explica la Voz de Galicia.
Finalmente no se celebró el juicio porque el juzgado consideró probado el arreglo matrimonial pactado entre el joven y la familia de la niña por 2.500 euros.
Más de un centenar de personas rechazan la "agresión"
Más de un centenar de personas han mostrado este viernes su repulsa tras la agresión sufrida por una mujer transexual que supuestamente fue arrojada desde la Muralla de Lugo en la madrugada del pasado domingo por un hombre con antecedentes previos.
En la protesta, convocada por colectivos como la Asociación de Familias de Menores Transexuales (Arelas) y la Asociación por la Libertad Afectivo-Sexual (Alas), Avante y Amizando, se ha leído un manifiesto a través del que se ha alertado de un "aumento" de la violencia LGTBIfóbica y han mostrado su repulsa a la "violencia" sufrida por la joven de 23 años, a la que han trasladado su fuerza y cariño.
En el acto al que han acudido representantes del PP, del PSOE, del BNG y Esquerda Unida, además, han tomado la palabra la activista Xacia Ceive y la presidenta de Arelas, Cristina Palacios, quien ha afeado al Ayuntamiento de Lugo que no disponga de un protocolo de ayuda al colectivo.
Además, en el acto se ha denunciado la "pasividad" de las instituciones y de parte de la ciudadanía ante este tipo de agresiones, y se ha pedido apoyo al colectivo en un contexto de "aumento de los discursos de odio hacia el colectivo LGTBI".
Y es que, tal y como ha señalado en declaraciones a Europa Press el presidente en Lugo de Alas, Marcos Fernández Trigo, el colectivo atraviesa "un momento delicado" en el que los protagonistas de estos discursos de "miedo y odio" hacia el colectivo pretenden arrebatarles "los avances conseguidos durante décadas".