Algunos niños que padecen parálisis cerebral no pueden hablar, andar o sonreír, pero muchos de ellos han notado una gran mejoría gracias a hacer nuevos amigos…los animales. La zooterapia, que pone a estos niños en contacto con caballos, perros o pájaros, les ayuda tanto a potenciar capacidades físicas como a aprender cosas sobre ellos.