El nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que produce la enfermedad conocida como COVID-19, mantiene en vilo al mundo entero y todavía queda mucha investigación por delante en relación al nuevo virus que ya se ha saldado con la vida de más de 177.466 de personas en todo el mundo.

El virus no afecta a todas las personas por igual y no provoca los mismos síntomas. Mientras algunas personas pasan la enfermedad de manera asintomática, otras sufren los graves efectos que provoca el Covid-19. Pese que en un principio se alertó de que los más vulnerables eran los ancianos y quienes tenían patologías previas, también hay personas aparentemente sanas y jóvenes ingresadas en las UCIs.

Son muchas personas las que han querido contar su experiencia tras haber pasado la enfermedad y haber sobrevivido a ella para que sus vivencias puedan ayudar a otros muchos enfermos que están pasando por lo mismo.

En numerosas ocasiones, los síntomas descritos son muy extraños, como los de una mujer rusa de 34 años que explicaba que "sentía arena en el pecho" en el momento en el que la ingresaron en el hospital con una neumonía bilateral, casi 40 grados de fiebre y sospecha de coronavirus.

"El primer test me lo hicieron unos días después de que presentara los síntomas. Todo empezó con una tos seca y me dolía respirar, sentía como si tuviera arena en el pecho. La fiebre se elevó y no bajaba, pero no sentía dolor en la garganta y tampoco tenía mocos, simplemente sentía debilidad y dolor en el cuerpo acompañado de un desorden gastrointestinal", contaba la mujer a medios rusos.

Después de ocho días ingresada, los médicos aún seguían sin poder controlar la fiebre, tenía náuseas y todo lo que comía le sabía amargo o hasta podrido.

"Cuando te acuestas por la noche eres incapaz de dormir por la fiebre y el dolor, escuchas el crujido de tus pulmones cada vez que respiras, como si alguien estuviera arrugando un papel o una bolsa. Cada vez que me daba un ataque de tos me asfixiaba y se me saltaban las lágrimas pensando que no volvería a casa", relató.

Otra mujer rusa de 36 años contaba también cómo vivió ella la enfermedad con síntomas que no tenían nada que ver con los descritos en la historia anterior. Esta mujer relataba que en cuestión de 10 días perdió completamente el sentido del olfato, pero no tenía tos ni problemas respiratorios.

Mientras que otra paciente de 50 años y sus hijos de 18 y 25 años se dieron cuenta de que estaban contagiados porque tenían los síntomas más comunes que desde un principio citaron los médicos. "Los síntomas fueron clásicos, un fuerte aumento de fiebre, signos generales de intoxicación, malestar, congestión nasal sin goteo y pérdida completa del olfato”, detalló la mujer.

Rusia, que hasta ahora guardaba con más o menos recelo las cifras de propagación del virus, ha confirmado más de 52.000 casos de Covid-19 y al menos 456 fallecidos.