Más de 182.000 casos y más de 19.100 muertos por coronavirus. Esas son las dramáticas cifras de la pandemia en España, que de acuerdo al último balance ofrecido por Sanidad este jueves 16 de abril ha dejado un total de 5.183 nuevos contagios, lo que supone un nuevo repunte con respecto a los 5.092 del día anterior, y mucho más si nos fijamos en los 3.045 del martes.

No obstante, como ha aseverado el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ese llamativo ascenso tiene que ver con el aumento de los test que están llevando a cabo las comunidades y cuyos datos se están trasladando al Gobierno para su contabilización. Ahora se hacen cerca de 40.000 pruebas diarias, mientras que hace unos días, en palabras del ministro de Sanidad, Salvador Illa, se estaban realizando unas “20.000 PCR”. Por este motivo, el incremento del 2,9% de los nuevos casos no es a priori una noticia tan mala como lo sería fuera de este contexto.

Más allá, “con el inicio del uso de pruebas serológicas, que lo que testan es si las personas están o han estado en el pasado infectadas, si han desarrollado inmunidad”, --a diferencia de las PCR, “que sí que lo que buscan es el virus”--, Simón explica que se hace “difícil” colocar a esos afectados “en la evolución de la epidemia” porque “no tienen síntomas asociados recientes”.

En este sentido, ha dicho, teniendo en cuenta los datos de las comunidades que han podido diferenciar los resultados de pruebas de anticuerpos de los resultados de PCR, ha habido 1.312 de los 5.183 nuevos casos que se refieren a “pruebas serológicas”; test rápidos, “en su mayoría”.

Por otra parte, en lo relativo a la dolorosísima cifra de muertes, también existen dificultades reconocidas al respecto de su contabilización. Hoy, en las últimas 24 horas el balance de Sanidad registra 551 nuevas muertes, lo que deja el total en 19.130 decesos por COVID-19. Sin embargo, no se han añadido los de Cataluña, que de un día a otro ha duplicado sus cifras oficiales, dado que ahora contabilizan los muertos en hospitales, residencias y domicilios teniendo también en cuenta la información aportada por las funerarias. Y además, en lo que respecta a los contagios también se están teniendo en cuenta los casos sospechosos que un profesional facultativo estima como probable caso.

Así, el balance ofrecido por la Conselleria de Salud de la Generalitat de Cataluña registra este martes 479 muertos más y contabiliza, partiendo con la información de las funerarias, un total de 7.576 muertes en la comunidad: 2.015 en residencia, 84 en centros sociosanitarios, 478 en casa, y el resto en hospitales o son casos no clasificables por falta de información.

De este modo, incluso esta dramática cifra, tras la cual se halla el dolor de miles de familias rotas por una pandemia que incluso les ha privado del duelo, se ha convertido en argumento para la polémica entre instituciones.

Al respecto, Fernando Simón ha sido muy claro: “La cifra real de fallecidos es difícil de conocer. Ni teniendo muy buenas estadísticas sanitarias vamos a conocer la cifra real de fallecidos por coronavirus”, ha dicho, insistiendo en que se sigue el protocolo internacional acordado, el cual dicta también la OMS. “Todos aquellos que tengan una prueba positiva y se les pueda identificar por tanto como personas que han estado o están infectadas por coronavirus y fallecen, como mínimo han fallecido con coronavirus. Si la causa de la muerte ha sido esa o no... es otra cuestión. Ahora mismo en España se están contabilizando todos aquellos infectados que fallecen y que tienen una prueba en la que se ha detectado el coronavirus, y que nos informan las comunidades autónomas”, ha precisado.

Entre tanto, la cifra más fiable y aquella a la que aferrarse en busca de esperanza y alivio es la de las altas médicas. Ya son un total de 74.797 las personas que se han recuperado del COVID-19 tras sumarse 3.944 altas en las últimas 24 horas. Además, gracias a ello, gracias al trabajo de unos sanitarios que están redoblando sus esfuerzos desde el primer momento de esta crisis, así como lo han hecho distintos sectores esenciales con el objetivo de remar en la misma dirección, como ha indicado Fernando Simón, "se aprecia un descenso en el número de hospitalizados e ingresos en UCI", algo sumamente importante en la lucha contra el virus.

Fuera de nuestras fronteras, con el coronavirus llegando a los dos millones de casos en el mundo y rebasando las 130.000 muertes, es Italia quien trae datos positivos en Europa: han registra el mayor descenso de hospitalizaciones desde el inicio del brote de coronavirus, con 750 pacientes menos, y los ingresados en UCI son 2.936, el número más bajo desde el 21 de marzo. Los contagios han subido ligeramente, pero es debido al aumento considerable en el número de pruebas. Las muertes, por su parte, han sido 525, un dato dramático pese a haber bajado las del día anterior. En total, suman más de 22.000 víctimas mortales y más de 168.000 casos.

Por su parte, Francia y Reino Unido registran un total de 165.000 y 103.000 casos respectivamente, mientras las muertes se elevan más allá de las 17.000 en Francia y más allá de las 13.000 en Reino Unido.

Entre tanto, en Estados Unidos, donde Donald Trump asegura que ya han llegado al pico de la curva y se plantean ya cómo abordar la flexibilización de las medidas, algo no exento de polémica, los casos se elevan más allá de los 674.000 y las muertes superan las 34.000.