Bill Gates donará 145 millones de euros a la OMS
Con esta donación intentarán cubrir parte de lo que Estados Unidos deja de aportar
La fundación Gates era ya la segunda mayor contribuyente después de Estados Unidos
La fundación del multimillonario Bill Gates y su esposa Melinda Gates ha realizado una donación millonaria a la Organización Mundial de la Salud en uno de los momentos más críticos de su historia por la crisis de coronavirus.
Bill Gates es conocido por ser una de las mentes más brillantes de la actualidad pero también por su labor solidaria con los más desfavorecidos. Desde que comenzó la crisis del coronavirus se ha implicado en la lucha, por ello el propietario de Microsoft ha decidido hacer una aportación extraordinaria, de su fundación a la Organización Mundial de la Salud.
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Esta donación, de más de 145 millones de euros, la hace para compensar la retirada de los fondos que Estados Unidos ha realizado, por orden de su presidente, Donald Trump, hace pocos días. Estados Unidos era el país que más dinero aportaba a la organización y por ello suponía un grave golpe.
Esos fondos, doscientos cincuenta millones de dólares, serán destinados a prevenir la expansión del coronavirus en África ante las gravísimas consecuencias planetarias que eso podría conllevar.
El matrimonio Gates critica la decisión de congelar los fondos por parte de Donald Trump ya que se produce en el peor momento posible. La fundación Gates era ya la segunda mayor contribuyente después de Estados Unidos.
"Encubrimiento de la propagación del coronavirus"
Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, decidió suspender los fondos que su Gobierno aporta a la Organización Mundial de la Salud por su gestión sobre el coronavirus, en un momento en el que el país se sitúa a la cabeza de la pandemia.
Según precisó el mandatario estadounidense durante la rueda de prensa, tiene en cuenta "el papel de la OMS en la mala administración y encubrimiento de la propagación del coronavirus".
El líder estadounidense ha justificado su decisión alegando que la OMS se opuso a la restricción de los viajes de China y otras naciones durante el primer estadio de la pandemia para evitar así su propagación.