Omar Montes ha cogido el teléfono de la recepción del ‘Hotel Playa Guadalix’ para hacer bromas a varios de sus compañeros. La última ‘perjudicada’ ha sido Miriam que no se ha tomado nada bien que el cantante “jugase con mis sentimientos” haciéndose pasar por el Súper y asegurando que su madre la esperaba en el confesionario. Llorando, Miriam ha corrido hasta allí cuando ha descubierto que no era más que una broma, lo que ha desatado su ira: “¡Pedazo de rata sucia! La próxima vez que hagas bromas con mi madre te las vas a ver conmigo ¡Sinvergüenza, canalla!”.