Tras la expulsión de su primo, Jonathan se queda destrozado. Pero sabe que sus compañeros están ahí para apoyarle y animarle, entre ellos, Yoli. La prima se ha preocupado por él y ha querido tranquilizarle y apoyarle. Y dada su tristeza, se ha metido en la cama con él para darle calor y cariño.