En la gran gala de los familiares y en la que podía ser su última noche juntos, Luis y Nerea se enfrentaban al 'cine de GH'. Jorge Javier les daba la bienvenida y daba paso al vídeo resumen de cómo ha sido su relación durante el programa. Mientras tanto, Natalia y Mila, sus madres, veían todo en directo desde el salón de la casa.
La pareja veía en la pantalla todas sus discusiones. Los momentos más tensos y los enfados más sonados hacían que ambos se pararan a pensar: "Jorge, sinceramente, son comportamientos de niñata. Lo reconozco. Son cosas de las que me arrepiento muchísimo", decía Nerea nada más finalizar el vídeo.
"Cuando te ves discutir desde fuera se ve de otra manera. No os lo mismo. Desde fuera parecemos tontos, sinceramente", comenzaba por su parte Luis. "Ahora que está nominada te arrepientes de esos días. En vez de haber discutido, deberíamos haber disfrutado, porque problemas graves no hemos tenido ninguno", continuaba.
El presentador le preguntaba a Nerea cómo se había visto en las imágenes: "Me he visto fatal", decía para acto seguido romper a llorar. "Me ha dado hasta vergüenza verlo", intentaba continuar. Pero las lágrimas se lo impedían y únicamente se dirgía a Luis para disculparse: "Perdón".
Ambos se abrazaban y él trataba de calmarla: "No pasa nada". "Me siento fatal. Ahora lo veo y sé que han sido tonterías innecesarias, no le tengo que decir nada de eso. Podría haber aprovechado el tiempo con él, sonriendo, disfrutando el uno del otro. La manera en la que me he dirigido a él, los berrinches, la forma de gritar… Todo, lo de tonto, lo de que lo dejamos… No tengo que utilizar eso, no se lo merece".
Minutos más tarde, y cuando Luis ya había abandonado la sala, Nerea veía cómo Natalia, su suegra, entraba por la puerta. Nada más verla, la concursante se levantaba y se dirgía a ella entre lágrimas con un claro mensaje: "Perdón". Ambas se abrazaban inmediatamente. La madre de Luis comenzaba entonces un discurso de calma.
"Escúchame, tranquila. No llores. No tienes que pedir perdón. Eres muy joven. Estáis metidos en una casa todos los días, en una convivencia muy dura. Yo me he enfadado, pero no pasa nada, ahora estamos bien, veas lo que veas. Por favor, no llores, cariño. Sois vosotros los que tenéis que hablar y decidir cuando salgáis. Relájate, por favor, no quiero que lo pases mal", comenzaba.
"Es súper duro, me siento fatal", insistía Nerea. Natalia le confesaba entonces que, como madre, había sufrido con algunas cosas, pero que son ellos quienes tienen que valorar todo: "A mí como madre me duele. Pero entiendo que esto es muy estresante, que estáis todo el día juntos, que tiene que ser muy duro. Es vuestra relación y vosotros sois lo que tenéis que decidir. Si decidís seguir, tenéis que buscar ayuda. Ahora todo está bien. Si te quedas, te pido que disfrutes mucho, que te rías, que lo pases bien".
Jorge Javier les pedía entonces que se despidieran y Natalia no dudaba en darle un mensaje de amor a su nuera: "No quiero que estés mal. Te quiero mucho". Nerea también se despedía: "Y yo, muchas gracias".
Tras reencontrarse con su suegra, Nerea se reencontraba también con su madre. Ambas enloquecían al verse y se fundían en un interminable abrazo. "Estoy súper orgullosa de ti", le decía Mila. "No te preocupes por nada, has hecho una autocrítica que olé, esto a parte de ser un concurso es un máster de aprendizaje", seguía.
De pronto aparecía Luis, que corría a abrazar a su suegra. Desde ese momento, Mila trataba de aconsejarles: "Apoyaos, y cuando tengáis que hablar algo, habladlo. Olvidaos de discutir, que estáis en 'Gran Hermano', ¿sabéis lo que es eso? Os quiero mucho".
En esta noche llena de emociones, Luis también recibía la sorpresa de su madre. Instantes antes de encontrarse, Natalia se escondía en la piscina de bolas. Al entrar a la 'sala de los sueños', Luis se tiraba sin pensárselo dos veces y sin saber que estaba cayendo encima de su madre.
La alegría era notable. "Qué delgado estás", le decía su madre. "Lo que te he echado de menos", aseguraba un Luis con los ojos lacrimosos y que tranquilizaba a su madre señalando que ya está mejor con Nerea. "Esto es un aprendizaje tremendo. Te va a dar mucho y te estás conociendo a ti mismo", apuntaba su madre.