Luca Brasi no es una pizzería de las de toda la vida. En este restaurante, ubicado en Chamartín, los ingredientes no son los de siempre y no podrán encontrar el clásico bacón o el tradicional pepperoni. Sin embargo, en su carta ha incorporado otros alimentos gourmet que no degustarás en ningún otro sitio y que te permitirán disfrutar de una fusión de sabores que te sorprenderá.

Pero en este restaurante no solo sus ingredientes no son los habituales. Sus dueños, César Berzal y Javier Lozano, también esconden una historia poco habitual donde la pasión por la pizza marcó su camino.

César, chef y socio de este restaurante, donde además de pizzas podrás disfrutar de una carta exquisita en la que está cuidada hasta el más mínimo detalle, no había pensado nunca en terminar dedicándose a este mundo. Técnico de sonido de una conocida cadena de radio, la pandemia marcó un antes y después en su vida. Mientras que muchos españoles se dedicaban a hacer pasteles para entretenerse, él se lo tomó mucho más en serio y se propuso hacer la pizza más rica del mundo.

Animado por sus amigos, César decidió abrir un pequeño puesto junto al madrileño Mercado de Barceló, donde su ahora compañero de negocio le conoció y, obsesionado con sus pizzas, no tardó en plantearle que se uniesen para abrir un restaurante. Los dos tenían claro que querían hacer algo nuevo y diferente, apostando por la materia prima y por ingredientes con los que ellos solo se atreven como el bogavante o la carne de wagyu.

Cuando le preguntamos a Javier el motivo que les llevó a apostar por este tipo de alimentos gourmet y prescindir de otros como el bacón o las salchichas, nos explica: "La comida está evolucionando. La pizza siempre ha sido igual y daba igual que te la tomases en España o en Filipinas. No hace falta ni que te leas los ingredientes, porque reconocer el nombre ya sabes lo que lleven".

"Hay hueco para todo y hacer una pizzería al uso no habría llamado tanto. Que solamente se pueda probar aquí una determinada pizza y hacer de eso una experiencia, llama a la gente que le divierte comer y probar cosas nuevas", nos ha explicado cuando le henos preguntado si no tienen miedo a que la ausencia de ingredientes tradicionales pueda limitarles el mercado.

Aunque no descartan abrir algún nuevo restaurante en el futuro, tienen claro que su restaurante nunca llegará a convertirse en una cadena: "No encaja con lo que buscamos, ingredientes muy buenos y de altísima calidad".

César y Javier nos confirman lo que muchas veces hemos escuchado: el secreto de la pizza está en la masa. "En cada ingrediente que lleva nos volvemos un poco locos. La masa madre proviene de una isla en la Costa Amalfitana y la traemos aquí. Elaboramos la masa y la fermentamos como mínimo 72 horas, haciendo que sea muy ligera para comer y una de las mejores que he probado", nos ha desvelado.

En su carta han incorporado ingredientes para sus entrantes que solamente ellos utilizan, como el queso de burra auténtico para hacer la burrata y las huevas de mújol para elaborar un tartar muy especial.

Los fundadores de Luca Brasi creen que en las pizzas tienen cabida para cualquier ingrediente y confían por completo en la creatividad de su equipo: "Ya nos han roto la mente varias veces. La pizza no tienen fronteras y puedes combinarlo todo con la base".

Aunque todas sus pizzas han tenido una gran acogida, la estrella de la carta es la que lleva entrecot: "Es la que más llama la atención. Poca gente no quiere probarla".

Ahora, solamente unos meses después de su apertura, estos dos socios han conseguido su objetivo y han sido galardonados con el segundo premio a la 'Mejor Pizza de Madrid' tras clasificarse para la final nacional.

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