"No es una dinastía". Con estas contundentes palabras, Bill Gates ha dejado claro en una entrevista que sus hijos no heredarán su inmensa fortuna de más de 150.000 millones de dólares.

A sus 69 años, el cofundador de Microsoft y una de las personas más ricas del mundo ha sorprendido a todos al confirmar que solo legará a cada uno de sus tres hijos un 1% de su patrimonio.

Así lo ha anunciado en el pódcast 'Figuring Out With Raj Shamani', donde ha reabierto el debate sobre la herencia, la responsabilidad social de los millonarios y hasta qué punto el dinero garantiza -o limita- el futuro de las nuevas generaciones. "Mis hijos recibieron una excelente crianza y educación. No sería un favor para ellos. No les pido que dirijan Microsoft", ha aclarado.

¿Qué lleva a uno de los hombres más poderosos del mundo a tomar una decisión tan radical sobre el destino de su legado? Su deseo de que sus hijos encuentren éxito por mérito propio y no dependan de una fortuna heredada.

Esta postura no es nueva para Gates. En entrevistas anteriores, ha mencionado que tanto él como su exmujer, Melinda French Gates, "queremos darles la libertad de hacer cualquier cosa, pero no una cantidad de dinero que les permita no hacer nada", explicó en una ocasión.

Bill y su exesposa tienen tres hijos: Jennifer Katharine, Rory John y Phoebe Adele. Jennifer, de 28 años, es una destacada amazona y posee títulos en biología humana de la Universidad de Stanford y en salud pública de la Universidad de Columbia. Está casada con el también jinete Nayel Nassar, y la pareja tiene dos hijas, Leila y Mia.

Rory, de 25 años, mantiene un perfil más reservado y actualmente está cursando un doctorado en el Institute of World Politics, tras haberse graduado de la Universidad de Chicago. Phoebe, de 22, se graduó en 2024 de Stanford con un título en biología humana y ha incursionado en el mundo de la moda y los medios, lanzando un pódcast llamado 'The Burnouts', y una plataforma de compras sostenibles denominada Phia.

Aunque los tres están recibiendo una excelente educación y numerosas facilidades, la mayor parte de su riqueza se destinará a causas benéficas.

Tal y como trascendió, se canalizará a la Fundación Bill y Melinda Gates, una de las organizaciones benéficas privadas más grandes del mundo, con una dotación de 70.000 millones de dólares en 2024. La fundación se centra en abordar problemas globales como la erradicación de enfermedades, la mejora de la educación y la lucha contra el cambio climático. Gates ha declarado su intención de donar prácticamente toda su fortuna a la fundación, con el objetivo de aumentar su gasto anual de 6.000 millones a 9.000 millones de dólares para 2026.

Esta elección refleja el compromiso de Gates con la filantropía y su creencia en la responsabilidad de los más acaudalados de contribuir al bienestar global. Recordemos que eb 2010, junto con Warren Buffett, lanzó 'The Giving Pledge', una iniciativa que invita a las personas más ricas del mundo a comprometerse a donar la mayor parte de su riqueza a causas benéficas.

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